¿Qué son los niños de alta demanda?
Los niños de alta demanda son hijos que demanda un alto nivel de atención por parte de sus padres. Éstos pueden sentirse desbordados y llegar incluso a cuestionarse si están cumpliendo con su papel como padres.
Características de los niños de alta demanda
Son niños muy sensibles, por lo que pueden frustrarse con facilidad. También suelen presentar problemas para dormir dado su alto nivel de energía y vitalidad.
Otras características que definen a los niños de alta demanda son:
- Ansiosos y preocupados.
- Viven con mucha intensidad sus emociones.
- Son muy perseverantes e insistentes.
- Necesitan estar en contacto continuo con un adulto puesto que les cuesta entretenerse por sí mismos.
- Buscan continuamente la atención y aceptación de los adultos.
Conocer a nuestros hijos es fundamental para aprender a tratar con ellos y cumplir con nuestra función como padres. En los casos de niños de alta demanda es aún más importante, ya que es muy frecuente que los padres se sientan cuestionados e incluso culpables de lo que le pasa a su hijo.
También se caracterizan por requerir una atención especial de sus padres, por lo que es importante aprender a interactuar y no acabar desbordados.
¿Qué puedes hacer si tu hijo es un niño de alta demanda?
Como ocurre con cualquier otro hijo, necesitan cubrir sus necesidades afectivas y sentir la atención que reclaman. Es fundamental aprender a mantener la calma y gestionar adecuadamente los enfados y rabietas, ya que son niños muy sensibles y pueden frustrarse con facilidad.
No obstante, eso no implica que dejemos de ser firmes y establezcamos límites, ya que de lo contrario le estaremos enviando un mensaje equivocado que derivará en inseguridad.
Recuerda que los niños de alta demanda son muy intensos y todo un reto para sus padres, pero también cuentan con una fuerte personalidad que los convierte en personas curiosas, apasionados, sociables y muy perseverantes con sus objetivos.