Distonía
Dr.Prof. Eduardo Tolosa - Neurología
Creado el: 28-10-2013
Editado el: 21-09-2023
Editado por: Marga Marquès
¿Qué es una distonía?
La distonía es un tipo de trastorno del movimiento que se caracteriza por contracciones musculares incontrolables. Estas contracciones causan torceduras involuntarias de partes del cuerpo y posturas anormales.
Esta condición puede afectar a un solo músculo, a un grupo de músculos o a todo el cuerpo.
Síntomas de la distonía
Los síntomas de la distonía pueden variar y pueden ser leves o severos.
Los primeros síntomas más comunes son:
- Calambres en los pies
- Dificultades en el habla
- Un pie que se arrastra al caminar
- Parpadeos excesivos
Los síntomas de la distonía pueden empeorar con el estrés o la fatiga, y con las constantes contracciones musculares, es algo común sentir dolor e incomodidad.
Causas de la distonía
En la actualidad, no se conocen las causas concretas que producen la distonía y este trastorno no se entiende completamente como una afección, sin embargo, se cree que puede deberse a desequilibrios químicos en la región del cerebro denominada ganglio basal.
Los ganglios basales son los responsables de iniciar las contracciones musculares, y si las células nerviosas no se comunican adecuadamente, las contracciones musculares pueden convertirse en involuntarias e incontrolables.
La distonía puede ser hereditaria por parte de los padres, o puede desarrollarse si los ganglios basales están dañados.
El daño a los ganglios basales puede ser el resultado de:
- Falta de oxígeno
- Infecciones
- Traumatismo cerebral
- Derrames cerebrales
- Tumores
- Intoxicación por monóxido de carbono
- Reacciones a ciertas drogas
¿Cómo sé si sufro una distonía? (Pruebas diagnósticas)
Para establecer el diagnóstico de una distonía, es importante tener en cuenta los antecedentes médicos y realizar una exploración física.
Además, puede ser necesaria la realización de una serie de pruebas, como un análisis de sangre o de orina, pruebas de imagen (resonancia magnética o TAC), pruebas genéticas o una electromiografía.
¿Se puede prevenir?
Aunque no se puede prevenir, se pueden seguir algunas recomendaciones para controlar su sintomatología.
Por un lado, es aconsejable aplicar calor o frío para aliviar el dolor muscular.
También es recomendable intentar manejar el estrés mediante técnicas de respiración profunda, el apoyo social o estableciendo un diálogo interno positivo.
Tratamientos para la distonía
El tratamiento para la distonía depende de su gravedad y de la parte del cuerpo que se vea afectada.
Existe un tratamiento bastante nuevo para la distonía, que emplea inyecciones de la toxina botulínica que se inyecta en los músculos afectados. La toxina botulínica bloquea la sustancia química llamada acetilcolina, que produce contracciones musculares. Con la repetición de este tipo de inyecciones, se puede recuperar cierto control sobre las contracciones musculares.
En casos más severos de distonía, la estimulación cerebral profunda se puede llevar a cabo como tratamiento. Esto implica la implantación de un electrodo en el área afectada del cerebro que está conectado a un estimulador, que emite pulsos eléctricos que apuntan a reducir el número de contracciones musculares involuntarias.
También existen medicamentos que pueden ayudar a los pacientes con distonía, controlando las comunicaciones químicas incorrectas que suceden en el cerebro y que son las causantes de las contracciones musculares.
Por último, existe la terapia física, terapia del lenguaje y técnicas de control del estrés que pueden ayudar a los pacientes con distonía a controlar sus síntomas.
¿Qué especialista lo trata?
El experto encargado del tratamiento de las distonías es el especialista en Neurología.