Dolor de talón: la importancia de tratarlo de forma temprana para evitar lesiones graves

En general, la mayoría de la población ha sufrido o sufrirá algún episodio de dolor de talón a lo largo de su vida, por lo que todo va a depender de la severidad y la duración en el tiempo de esos síntomas.

Muchas personas acaban el día con dolor de talón y esto influye de manera negativa en su calidad de vida, porque permanecen mucho tiempo de pie en su puesto de trabajo, y otras personas no pueden disfrutar de su deporte favorito debido a este incómodo dolor de talón.

¿Cuándo debemos consultar con un médico si tenemos dolor en el talón?

Cuando los síntomas no mejoran con el reposo y los métodos tradicionales de analgesia, se hace imprescindible que el paciente acuda a un profesional experto en Podología que valore su dolor y lo intente remediar lo antes posible.

Lo que es verdaderamente importante es intentar conocer los matices que presenta el dolor de talón que presenta el paciente, ya que eso nos da pistas definitivas sobre el origen del dolor y nos permite plantear el mejor tratamiento.

¿Qué factores pueden provocar su aparición?

El dolor de talón siempre tiene un origen, y hay que tener en cuenta que en el talón hay muchas estructuras que pueden dañarse.

Lamentablemente, la mayor parte de las veces, el diagnóstico se simplifica a fascitis o espolón lo cual me parece un error garrafal.

Lo que está claro es que, a no ser que haya un traumatismo previo o alguna otra patología, el dolor viene producido por una alteración en la manera de plantar el pie, lo que conduce a que las estructuras que se anclan en el talón sufran en exceso y terminen lesionándose.

¿Correr puede provocar dolor en el talón?

Correr no produce dolor de talón, porque si fuera así todas las personas que corren tendrían dolor y eso no es así. Lo que sí ocurre es que los deportistas que no tienen una pisada correcta y que, por lo tanto, su mecánica no es la adecuada, tienen una mayor predisposición a padecer dolor en el talón.

Por eso es tan importante que los deportistas se pongan en manos de podólogos expertos en biomecánica para comprobar cómo es su pisada y qué aspectos se pueden mejorar.

¿El calzado influye en la aparición de este tipo de dolor? ¿Cómo debe ser un calzado para prevenir dolor de talón?

Sin duda el calzado es un elemento que nos puede ayudar de manera activa en la prevención del dolor de talón, pero también una elección inadecuada del mismo nos puede conducir a una lesión casi segura.

Hay que pensar que el talón recibe muchos impactos contra el suelo a lo largo del día, más aún si la persona tiene un trabajo que requiera caminar o estar muchas horas de pie.

Cuando damos el paso, el talón aterriza violentamente contra el suelo y el calzado es un aliado que puede ayudarnos a amortiguar esos impactos y que no se vuelvan lesivos, por lo que es muy importante elegir de manera concienzuda el calzado que vamos a usar.

No me gusta generalizar en la elección del calzado, pero la evidencia científica habla de que el dolor de talón se previene mejor con zapatos con cierto tacón y de consistencia dura, aunque parezca contradictorio.

¿Cuáles son las patologías asociadas al dolor de talón?

Pues desde la disminución del espesor de la almohadilla grasa plantar, a fasciopatías, tendinopatías insercionales, atrapamientos nerviosos, etc. Son tantas las estructuras que pueden estar involucradas en el dolor de talón que es una osadía resumirlo todo a fascitis o espolón.

¿Qué tipo de tratamientos pueden estar indicados para el dolor de talón?

Hay muchos tratamientos disponibles en función de las características del dolor y de la sospecha diagnóstica que tengamos.

Un tratamiento muy extendido, sobre todo en deportistas, es el vendaje funcional, el vendaje con neurotape, masajes, etc. Hay otros tratamientos que incluyen ondas de choque, fisioterapia, punción seca.

En la actualidad es muy común el uso de infiltraciones con Plasma Rico en Plaquetas (PRP), ácido hialurónico, colágeno o incluso corticoides.

En casos extremos es necesario recurrir a la cirugía con técnicas poco invasivas que ayudan a aliviar el dolor.