Aceite de coco, agua y algas, tres alimentos con grandes propiedades

Existen una serie de alimentos conocidos actualmente como “superalimentos” por sus numerosas propiedades, beneficiosas para la salud. La Dra. Martín, especialista en Nutrición y Dietética, explica cuándo y cómo tomar el aceite de coco, el agua y las algas.

Aceite de coco: propiedades antibacterianas, antifúngicas y antiinflamatorias

El aceite de coco se considera uno de los más saludables, a pesar de su alto contenido en grasas saturadas. A diferencia de las grasas saturadas de origen animal, estas contienen los triglicéridos de la cadena media y afectan de manera positiva al colesterol “bueno” (HDL). De hecho, hay cada vez más estudios que demuestran que es beneficioso para la salud cardiovascular.  Compuesto en más de un 50% por ácido laúrico, el aceite de coco tiene propiedades antibacterianas, antifúngicas y antiinflamatorias.

Se puede utilizar el aceite de coco crudo o para cocinar. Su sabor delicioso da un toque especial a los postres, los currys y otros platos. Además, es un excelente cosmético natural para la piel y el cabello.

Es importante escoger siempre el aceite virgen extra y no excederse en las cantidades: como cualquier otra grasa, es muy calórica, 1 cucharada aporta 100 kcal.

Por último, no es recomendable sustituir el aceite de oliva por el aceite de coco en la alimentación, dado que el aceite de oliva sigue siendo el número uno entre las grasas saludables que se deben consumir a diario.

Agua, ¿qué cantidad y cuándo beber?

Para mantener el  correcto balance hídrico es recomendable tomar unos 30 ml de agua al día por 1 kg de peso. Los días de mucho calor probablemente apetezca beber más. Si se practica deporte intenso que haga sudar, es importante beber 1 litro de agua extra por cada hora de ejercicio.

¿Pero, qué momento es el mejor para tomar 6-8 vasos de agua durante el día?

Un vaso de agua tibia por la mañana, unos 15-20 minutos antes de desayunar, ayuda a poner en marcha nuestro metabolismo, eliminar toxinas y depurar el estómago. Medio litro de agua antes de las principales comidas ayuda a controlar mejor el apetito y estimula el metabolismo, lo cual ayudará a quemar calorías adicionales a lo largo del día. Beber un poco de agua durante las comidas solo si se tiene sed, y procurar evitarla durante 1 hora después de comer para no diluir los jugos digestivos.

Si es difícil beber agua pura, se puede aromatizar, añadiendo hojas de menta, rodajas de pepino y de limón, jengibre o frutos. 

Algas: un superalimento con grandes propiedades

Las algas se consideran un “superalimento” por sus altas concentraciones de yodo, calcio, fósforo, magnesio y hierro, y también antioxidantes, fibra, vitaminas y proteína vegetal de alta calidad. Son bajas en grasas, muy nutritivas y su consumo en pequeñas cantidades aporta nutrientes a la salud de los huesos y los dientes, previene la anemia y las enfermedades cardiovasculares.

Es bueno experimentar y descubrir diferentes maneras de cocinar las algas: crudas, fermentadas, cocidas y fritas.

Las algas nori, dulse, wakame y la lechuga del mar pueden comerse en ensaladas, sopas y guarniciones. Las raciones deben ser pequeñas para no superar la dosis de yodo diaria recomendada. Se puede añadir el polvo del alga espirulina en zumos y batidos. Las algas kombu o hiziki aportan un buen sabor a los guisos y ablandan las legumbres.

Hay que tener en cuenta que, en el caso de algunas enfermedades autoinmunes y de tiroides, la ingesta regular de algas puede ser contraindicada. Es importante consultar con el médico si se toman anticoagulantes y medicación para la hipertensión.