La incontinencia urinaria femenina: tipos y tratamiento

La incontinencia urinaria femenina es una patología muy común en las mujeres a partir de la etapa postmenopáusica, que supone una pérdida involuntaria de orina. Esto no quiere decir que haya que darlo por “normal”. Es una enfermedad, y como tal debe ser tratada, la paciente no ha de “resignarse” a esa situación, más cuando existen soluciones fiables y seguras.

Existen varios tipos de incontinencia, que hacen que las pérdidas se den en circunstancias distintas. Mientras que algunas mujeres pueden tener pérdidas de orina al hacer esfuerzos físicos, otras no pueden controlar el deseo de orinar. También existen casos en los que las pérdidas se ocasionan durante la actividad sexual.

¿Cómo se producen los escapes de orina?

Generalmente, las pérdidas de orina están vinculadas a un mal funcionamiento de los músculos de contracción y los músculos del esfínter, que permiten la retención o expulsión de orina. Las mujeres son las más afectadas por esta patología, ya que su aparición se ve favorecida por factores de riesgo, como el embarazo, el parto y la menopausia. En algunos casos, el mal funcionamiento de los tejidos musculares también puede ser causado por cirugías, diabetes y obesidad, entre otras lesiones.

¿Por qué existen diferentes tipos de incontinencia urinaria femenina?

Las mujeres en etapa postmenopáusica sufren pérdidas de orina, que se producen por distintos factores. Existen cinco tipos principales:

• Por motivos funcionales: Son aquellos casos en que el paciente no puede controlar sus esfínteres a causa de una enfermedad o patología que les incapacita.
• De urgencia: Se produce cuando se genera una necesidad de orinar de manera imprevista. Generalmente, se produce cuando el paciente se hace mayor.
• De esfuerzo: Se trata del tipo de incontinencia más extendido. Tiene lugar cuando se producen acciones voluntarias o involuntarias (tos, ejercicio, risa…), que implican una presión en la vejiga, incapacitándola para retener la orina.
• Rebosamiento: Se produce cuando se acumula mucha cantidad de orina en la vejiga, de manera que se ocasionan escapes incontrolados. Generalmente, este tipo de incontinencia es más común entre los hombres.
• Mixto: Es un tipo de incontinencia que se ocasiona cuando se presentan alguno de los anteriores al mismo tiempo.

Tratamientos contra la incontinencia

Los escapes de orina se pueden disminuir a través de diferentes tratamientos. Y en algunos casos, si se tratan mediante cirugía, pueden hacerlos desaparecer. En todos los casos, el tratamiento siempre está relacionado con el tipo de incontinencia que padezca el paciente.

Cuando la incontinencia urinaria tiene lugar por motivos funcionales, el único tratamiento que tiene buenos resultados es el cateterismo uretral. En el caso de la incontinencia de esfuerzo se puede solucionar mediante tratamiento quirúrgico, mientras que la de urgencia se puede tratar con terapia farmacológica o con Botox. Por su parte, la incontinencia de rebosamiento puede solucionarse realizando dilataciones de la uretra.

La malla sub-uretral: la solución más eficaz para la incontinencia del esfuerzo

Actualmente, existen tratamientos eficaces para solucionar la incontinencia, como la malla sub-uretral, que está fabricada con un material muy seguro, obteniendo resultados exitosos en las mujeres operadas.

Los tratamientos quirúrgicos para colocar una malla sub-uretral pueden ser una solución perdurable en el tiempo. Está indicada únicamente para los casos de incontinencia de esfuerzo, porque si se utiliza como solución para otro tipo de incontinencia, pueden aparecer complicaciones en la salud del paciente.

Los pasos previos para llevar a cabo la cirugía consisten en realizar una serie de pruebas generales para preparar la intervención. En la mayoría de los casos, la operación, que tiene una duración de 30 minutos, es sencilla y poco invasiva, con pocas complicaciones en el postoperatorio. De hecho, la Dra. Blanca Madurga, reputada especialista de nuestro país y miembro del equipo de profesionales de la Clínica Andromedi, garantiza medidas de seguridad para combatir las posibles infecciones tras la colocación de la malla.

Principales problemas de la intervención

La intervención es sencilla, pero puede presentar algunas complicaciones, como el rechazo de la malla por parte del propio organismo. Por otro lado, existen casos muy reducidos en los que las mujeres padecen dolor durante o después del acto sexual.

Incontinencia urinaria femenina: superar la vergüenza

La incontinencia urinaria femenina provoca molestias por los escapes de orina, pero también produce sentimientos desagradables y vergonzosos por parte de las pacientes. En muchas ocasiones, la falta de información contribuye a agravar el problema. Por eso, es muy importante acudir a los mejores especialistas para realizar un diagnóstico y obtener un tratamiento.