Trastorno obsesivo-compulsivo: la importancia del abordaje psicoterapéutico
Written by:Podemos decir que el trastorno obsesivo-compulsivo es un trastorno de ansiedad caracterizado principalmente por la presencia de pensamientos obsesivos y de conductas de carácter compulsivo.
Estos pensamientos obsesivos de carácter intrusivos suelen ser recurrentes y persistentes, lo cual producen preocupación excesiva e inquietud.
En cambio, las conductas compulsivas suelen ir encaminadas hacia una reducción de la ansiedad inducida.
¿Qué tipos de trastornos obsesivo-compulsivos existen?
Hay que diferenciar entre los de contaminación, verificación, orden y simetría, fobia de impulso como las sexuales o religiosas, y la relacional.
conductual para facilitar la adherencia y el éxito del tratamiento
¿Cómo podemos identificarlos?
Todos estos trastornos podemos identificarlos por la persistencia de pensamientos muy recurrentes y de carácter irracional que generan niveles muy significativos de ansiedad y de malestar.
Además, las compulsiones tienen una función dentro de la dinámica de la creencia ilógica, cuyo objetivo es la reducción de esa ansiedad y malestar producido por esa creencia.
¿Qué puede causar un trastorno de este tipo?
Este tipo de trastorno deriva generalmente en una limitación y restricción de nuestra calidad de vida al dedicar un tiempo excesivo a todos los aspectos que tienen que ver con los rituales compulsivos.
Otras posibles consecuencias sería la evitación de situaciones o tareas que no estén dentro de la dinámica del pensamiento obsesivo, de ahí las limitaciones en aspectos importantes de la vida diaria como el trabajo, o la evitación de contextos clínicos como hospitales por el temor a contagiarse.
¿Cómo se trata un trastorno obsesivo-compulsivo?
En ocasiones, el trastorno obsesivo-compulsivo se puede tratar desde una perspectiva farmacológica con antidepresivos (ISRS) que deben ser prescritos por el médico psiquiatra, pero es primordial el abordaje psicoterapéutico con técnicas de corte cognitivo-conductual para facilitar la adherencia y el éxito del tratamiento.
Entre las técnicas más efectivas para su tratamiento se encuentra la exposición y prevención de respuesta en la cual, el paciente se expone a la intensidad de los pensamientos obsesivos y previene la aparición de la compulsión vinculante. Con esto aumentamos la tolerancia del paciente ante dichas obsesiones.
