Queratocono y otras dilataciones de la córnea: opciones de tratamiento
Escrito por:Las ectasias son enfermedades degenerativas de la córnea (primera capa transparente del ojo) en que esta se adelgaza y abomba progresivamente. La ectasia más común es el queratocono, aunque también existen otras formas como la degeneración marginal pelúcida, el queratoglobo y la ectasia postquirúrgica.
Su causa concreta es poco conocida. Entre los factores de riesgo para su desarrollo destacan los antecedentes familiares, la raza, la atopia y, muy especialmente, el frotamiento ocular.

¿Cómo se manifiestan el queratocono y las ectasias?
La deformación progresiva de la córnea conlleva, habitualmente, un aumento progresivo de la miopía y el astigmatismo que, por su irregularidad, no puede corregirse completamente con gafas ni lentes de contacto blandas.
Habitualmente los síntomas, sobre todo los cambios frecuentes de graduación y empeoramiento gradual de la visión, comienzan hacia la adolescencia. Normalmente afecta a ambos ojos, aunque de forma asimétrica, y progresa hasta la quinta década de la vida.
Diagnóstico del queratocono
Para su diagnóstico es fundamental la valoración de la topografía corneal por parte de un especialista en Oftalmología. Además, esta prueba permitirá saber si existe progresión presente y cuál es las mejor forma de tratamiento en cada momento.
¿Cómo tratar el queratocono o cualquier ectasia?
El tratamiento irá dirigido, por una parte, a detener la progresión de la ectasia, y por otra a corregir la visión. Existen diversas técnicas para ello:
- Crosslinking corneal (reticulación del colágeno): es un tratamiento no invasivo y eficaz para detener el avance de la enfermedad, basado en el uso de riboflavina y luz ultravioleta. Para poder indicar este tratamiento es esencial un diagnóstico precoz.
- Lentes de contacto rígidas: cuando las gafas ya no pueden corregir la deformidad de la córnea, estas lentillas pueden compensar, hasta cierto punto, dicha irregularidad.
- Anillos intracorneales: son pequeños segmentos de arco de polimetilmetacrilato que se implantan en el espesor de la córnea. Están indicados cuando las lentes rígidas no son bien toleradas o no aportan buena visión. Regularizan la forma de la córnea para permitir la corrección óptica.
- Lentes intraoculares: se pueden asociar a los anteriores para corregir grandes defectos de graduación.
- Trasplante de córnea: en casos avanzados o cuando se han agotado las opciones previas, es necesario recurrir a él para restablecer una córnea regular y transparente.