¿Cómo reconocer y ayudar a una persona sufre depresión?

La depresión es una enfermedad mental que puede afectar a cualquier persona, sin importar su edad, género o situación social. Identificar la depresión en alguien cercano puede ser difícil, ya que los síntomas pueden variar de una persona a otra y a menudo se confunden con cambios temporales de ánimo.

Algunos signos comunes a los que debemos prestar atención incluyen:

• Cambios en el estado de ánimo: la tristeza persistente, la irritabilidad, la apatía y la falta de interés en actividades que solían disfrutar son señales de alerta.
• Alteraciones del sueño y el apetito: insomnio o dormir en exceso, así como cambios en el apetito que conducen a la pérdida o ganancia de peso significativa, pueden indicar depresión.
• Fatiga y falta de energía: las personas deprimidas a menudo se sienten agotadas, incluso después de un sueño adecuado, y pueden tener dificultades para concentrarse en las tareas diarias.
• Sentimientos de inutilidad o culpa: las personas con depresión pueden experimentar una disminución de la autoestima y sentirse culpables por situaciones que están fuera de su control.
• Pensamientos suicidas: este es un signo de depresión grave y requiere atención inmediata. Los comentarios sobre querer morir o sentir que la vida no vale la pena deben tomarse muy en serio.

¿Cómo apoyamos a un ser querido que es reacio a buscar ayuda profesional?

Apoyar a un ser querido que se muestra reacio a buscar ayuda profesional, como acudir a un psicólogo, puede ser complicado, pero hay varias formas en las que se puede ayudar:

• Escucha activa y comprensiva: escucha atentamente las preocupaciones y los miedos de tu ser querido sin juzgar ni presionar. Valida sus sentimientos y muestra empatía hacia sus experiencias.
• Explora las razones detrás de su resistencia: trata de comprender por qué tu ser querido no quiere buscar ayuda profesional. Puede tener miedo al estigma social, preocupaciones financieras, creencias erróneas sobre la terapia o simplemente sentirse abrumado por la idea de enfrentar sus problemas.
• Proporciona información educativa: ofrece información precisa y basada en evidencia sobre la terapia y sus beneficios. Explícale que buscar ayuda profesional no es un signo de debilidad, sino un paso valiente hacia la recuperación y el bienestar emocional.
• Comparte tus propias experiencias: si te sientes cómodo, comparte tus propias experiencias positivas con la terapia o cómo buscar ayuda profesional te ha ayudado en el pasado. Esto puede ayudar a reducir el estigma y mostrarle a tu ser querido que no está solo en su lucha.
• Ofrece acompañamiento y apoyo práctico: si tu ser querido está abierto a la idea, ofrécele acompañarlo a la primera cita con un profesional de la salud mental. Puedes ayudarle a buscar opciones de terapeutas, hacer llamadas telefónicas para obtener información o simplemente estar ahí para ofrecer apoyo emocional.
• Respeta sus límites y tiempos: reconoce que cada persona tiene su propio proceso y que puede llevar tiempo para que tu ser querido se sienta cómodo con la idea de buscar ayuda profesional. Respeta sus límites y evita presionarlo demasiado.

Es importante mantener abiertas las líneas de comunicación, mostrar apoyo continuo y disposición para hablar sobre la terapia en el futuro. Hazle saber que estás ahí para él o ella en cualquier momento.