Ciática: descripción, síntomas, causas, tratamientos y prevención

La ciática es una disfunción del nervio ciático debido a un estiramiento o una compresión del mismo. También puede aparecer por un problema discal de la raíz del nervio a nivel L4 y L5. Por esta razón, el dolor puede aparecer en cualquier punto del recorrido del nervio, que va desde la zona lumbar baja, descendiendo por el centro del glúteo, en el medio de la parte posterior del muslo y de la pantorrilla.

Después de mucho rato sentado y durante la noche, el dolor suele aumentar. Suele haber dolor en el medio del glúteo por la compresión del músculo piramidal, en los isquiotibiales y en los gastrocnemios. Puede presentarse pérdida de fuerza y hormigueo.

La percepción del dolor puede cambiar durante el tiempo, mejorando o empeorando la sintomatología, en función de otros factores que influyen en el cuadro clínico: otras enfermedades, infecciones, estado de ánimo y disfunción visceral abdominal, entre otras.

¿Cuáles son las causas más frecuentes de la ciática?

Puede ser debido a una hernia o protrusión discal en los segmentos vertebrales L4-L5 o cualquier otro factor estresante que provoque una compresión directa o indirecta sobre el nervio.

A nivel de la columna, el mismo disco herniado y el edema provocan una compresión mecánica y una alteración bioquímica local debido a la inflamación. A nivel periférico, esta compresión suele asociarse a contracturas musculares cercanas al recorrido del ciático.

Refleja una disfunción del tracto digestivo que puede irritar los nervios de la columna vertebral, pudiendo ser la causa o un factor irritante del cuadro clínico. Finalmente, cualquier alteración biomecánica de la columna, la pelvis y las extremidades inferiores puede favorecer una de las alteraciones anteriormente citadas.

¿Qué tratamientos son efectivos para aliviar el dolor y la incomodidad de la ciática?

Sin duda alguna, el tratamiento de fisioterapia y osteopatía resulta ser muy eficaz. Una vez identificada la raíz del síntoma a través de una meticulosa exploración, disponemos de diferentes técnicas manuales de masaje, movilización neural, estiramientos y punción seca, entre otras, que han resultado muy efectivas para aliviar y resolver el cuadro agudo producido por la ciática.

¿Qué ejercicios o estiramientos pueden ayudar a prevenir o reducir la aparición de la ciática?

Los ejercicios de estiramiento axial de columna, el estiramiento de la cadena miofascial posterior y el fortalecimiento del core abdominal son los más efectivos. Dependiendo de la causa y del caso particular de la persona, se debería investigar sobre el patrón postural que favorece la lesión.

La fuerza muscular, la elasticidad y la consciencia corporal son muy importantes para que se den cambios profundos. Los ejercicios que favorecen la báscula pélvica y los que fortalecen y estimulan las caderas y las piernas son muy útiles y eficaces.

¿Cómo se puede prevenir la recurrencia de la ciática?

Es muy importante que la persona tome consciencia de su cuerpo, de las señales y mensajes que este envía bajo forma de sensaciones.

Si la persona está atenta y conectada a la percepción interna, será más efectiva la actuación a tomar. Para lograrlo, es imprescindible realizar alguna actividad física para favorecer la alineación postural, aumentar la fuerza de las piernas, la propiocepción de los pies y la efectividad de la musculatura del core, que estabiliza la columna y la pelvis.