¿Cómo puede la terapia ayudarnos a manejar la ansiedad y cambiar nuestra percepción del miedo?
Written by:La ansiedad podemos definirla como el mecanismo que tiene nuestro cuerpo para defenderse ante los peligros. Este mecanismo nos permite activarnos al 150%, incluso estando en reposo absoluto en cuestión de segundos. Además, es un sistema que nos defiende por lo que sería contraproducente que nos hiciera daño. Tiene una duración máxima de 20 minutos, al ser un sistema de emergencia no puede durar mucho y activarlo nos dejará cansados.
Es importante que este sistema se active ante la percepción de peligros, no tiene por qué existir siquiera. En este sentido, tiene una forma de actuar que a nivel evolutivo está enfocada a resolver peligros de tipo físico y que, a día de hoy, puede hacernos sufrir mucho pues se activa ante peligros para los que ese llevarnos al 150% de activación solo nos hace sufrir, incluso ante cosas que a todas luces no son peligrosas, pero se perciben como tales (miedo a volar, la fobia más común).
Digamos que sería un botón que pulsa nuestro organismo cuando cree que hay peligro, por lógica no nos pararemos a evaluar concienzudamente si lo que tenemos delante es un perro grande jugando o uno que viene a por nosotros, pulsaremos y una vez estemos subidos en la farola veremos que era.
¿Cuáles son las señales de ansiedad que a menudo pasan desapercibidas?
Cuando este botón se activa y funciona, digamos, por ejemplo, en un accidente de tráfico, ni siquiera nos planteamos si era ansiedad. El caso es que esa activación nos ha venido genial para recordar que el parabrisas puede romperse con los pies.
¿Cómo influye la ansiedad en la toma de decisiones en situaciones cotidianas?
La ansiedad nos activa para buscar respuestas lo más efectivas y rápidas posibles a la vez que nos prepara para posibles peligros derivados de eso que nos ha hecho pulsar el botón. La toma de decisiones se ve muy influida por este hecho, una situación que desde la calma podría ser sencilla de resolver puede convertirse en un momento muy complejo con mucho sufrimiento.
No se pueden hacer sumas y restas con el perro enorme viniendo hacia mí.
¿Cómo nos puede ayudar la terapia?
En dos direcciones principales:
- Una sería la revisión de esos miedos para los que el mecanismo de la ansiedad no sirve. Desmontarlos poco a poco para facilitar que ese sistema no se active porque la percepción de miedo habrá cambiado (recordemos que la ansiedad es la activación ante la percepción de peligro, el peligro ni siquiera tiene por qué existir).
- La otra dirección sería la de cambiar cómo gestionamos la ansiedad, si mi cabeza ha entendido que montar en moto es peligroso (aunque sepamos que es un miedo irracional) hasta que no nos montemos un número de veces no bajará ese miedo que sentimos. Sería algo así como hazlo aunque tengas miedo, si sabes que no hay peligro el objetivo es mostrárselo a tu sistema de alerta y hasta que esa alarma no se active y dejemos de correr, mi cuerpo no entenderá que se activó ante lo que no debía.
¿Qué estrategias de autoayuda pueden ser eficaces para controlar la ansiedad en situaciones específicas?
En principio ninguna, es complejo llevar a cabo un trabajo en gestión de ansiedad sin ayuda de un especialista en Psicología. Si aun así tuviera que hacer una recomendación plantearía lo siguiente:
No controlarla y ni ponerla en duda, desde la ansiedad el peligro será absoluto y tremendo, pero incluso dentro del momento de haber activado el botón puedo darme cuenta de que no sé si es cierto lo que me dice mi cabeza, aunque sí sé que tengo ansiedad. El objetivo es dejar que pase para ver que no pasa nada. Hazlo con miedo, pero hazlo.