Blefaroplastia: dar nueva forma al párpado para rejuvenecer la mirada
Written by:La blefaroplastia es una técnica quirúrgica para rejuvenecer la mirada. Principalmente se corrige el exceso de piel y las bolsas, pero también otras alteraciones de la posición del párpado, para darle un aspecto más juvenil.
Blefaroplastia en párpados superiores e inferiores
Se puede hacer en los párpados superiores, donde sobra fundamentalmente piel, pero en ocasiones también puede haber caída de la altura del párpado, caída de la ceja o de la glándula lagrimal, o bien un exceso de grasa en diferentes zonas.
Lo que se busca con esta intervención es darle una nueva forma al párpado para recuperar el aspecto juvenil sin cambiar los rasgos físicos de la persona, y buscando siempre un resultado natural.
En los párpados inferiores, en cambio, siempre hay que ser muy prudente con la piel para evitar posibles complicaciones. La mayoría de veces la cirugía de las bolsas se realiza por vía conjuntival y se realiza también alguna técnica para fijar la posición del párpado. Siempre se intenta esconder las cicatrices en pliegues naturales para que resulten prácticamente invisibles.
Aspectos a valorar antes de una blefaroplastia
El principal cuidado de todo especialista en Oftalmología es el ojo, por lo que siempre se intentará protegerlo al máximo y se valorará, previamente, si hay algún problema, principalmente de tipo ojo seco. Además, también se comprobará que no haya ningún problema de cierre ni de motilidad de los párpados.
¿Cómo será el postoperatorio tras una blefaroplastia?
En el postoperatorio es de esperar la aparición de hematomas, que siempre se intentarán minimizar, así como edema o hinchazón, que mejoran aplicando algunas medidas. No es doloroso en absoluto y lo habitual es que el paciente no tenga que tomar ningún tipo de calmante. Los puntos se retiran, generalmente, a los 6 días de la intervención, y el paciente puede recuperar su actividad normal de manera inmediata.
¿Los resultados son definitivos?
Los resultados son duraderos, aunque la laxitud de la piel y los tejidos de algunos pacientes (pocos) puede hacer que requieran un retoque, pero generalmente no antes de 10-12 años.
