Micosis Cutáneas: tipos, diagnóstico y tratamiento

Las micosis cutáneas en España son enfermedades de la piel, del cabello o de las uñas producidas por hongos. Existen fundamentalmente tres:

La primera tiene un nombre muy raro: pitiriasis versicolor, pero todo el mundo la conoce como “hongos”. Producen después del verano manchas blancas en la parte superior de la espalda y brazos. Esta producida por una levadura. No es contagiosa. Pero si recidivante o sea que tiene tendencia a repetir.

La segunda son las candidiasis, que están producidas por levaduras llamadas cándidas. Pueden producir infecciones en los genitales masculinos y femeninos, a veces como enfermedad de transmisión sexual, dando lugar a lesiones blanquecinas y escozor. Por otro lado también puede afectar la boca tanto de niños como de adultos, especialmente después de tomar antibióticos. Son contagiosas.

En tercer lugar las “dermatoficias” o micosis en sentido popular, también llamadas “tiñas”. Están producidas por hongos llamados dermatofitos. Son contagiosas no solo entre personas, sino también a partir de animales domésticos, como los perros, gatos y conejos. Producen en la cabeza de los niños calvas redondas, en el cuerpo placas rojas, redondas y con escamas, y en las uñas engrosamiento y separación de las mismas, especialmente de las uñas gordas de los pies.

Indicaciones o hábitos para evitar las micosis cutáneas

Los expertos en Dermatología aconsejan una serie de hábitos cuyo seguimiento previene o disminuye las posibilidades de que aparezcan este tipo de infecciones.

Para la pitiriasis versicolor, una buena higiene y en las personas predispuestas no utilizar leches ni aceites corporales. No tomar sol antes del tratamiento.

Las candidiasis genitales, se previenen con el uso de preservativo, la circuncisión y una buena higiene. La bucal con estudio de la diabetes y tener en cuenta su aparición después del uso de antibióticos para otros procesos.

Para las dermatoficias lo primero es evitar posibles contactos con animales y también con otras personas, especialmente en niños. Por supuesto una buena higiene es muy importante.

Para finalizar, decir que todas tienen buen tratamiento, pero la dificultad es que cada una tiene un tratamiento diferente y que es fundamental conocer el hongo causante para poder dar consejos sobre cómo prevenir y evitar el contagio de otras personas.