Ansiedad: ¿cómo controlarla?

Para poder controlar la ansiedad, en primer lugar, es necesario saber la causa que la origina. Por ello, es necesario contar con una valoración médica y determinar el modo en que se tratará.

Si es de origen psíquico, el facultativo será quién le indique cómo tratar la enfermedad. Por ejemplo, si es un rasgo de carácter o de ansiedad generalizada, reactiva a algunas situaciones o de aparición indeterminada. También debemos valorar el grado de malestar que ocasiona.

En cualquier caso, y aunque a veces no se lleguen ni a utilizar, tener un remedio médico como el uso del ansiolítico cumplen la función de aliviar el angustioso malestar. En ocasiones, se convierten en amuletos que nos dan seguridad. Aun así, no es suficiente.

Para la ansiedad de origen psíquico, siempre hay un motivo en nuestra historia, una vivencia personal o la intensidad con la que vivimos el día a día, muchas veces inconsciente, que es necesario desvelar.

Únicamente mediante un trabajo psicoterapéutico, el trabajo activo de paciente y un psicoterapeuta, orientado descifrar el origen del conflicto, su modo de presentarse y de repetirse a lo largo de nuestra historia, aprenderemos a fortalecer nuestras defensas y ser menos vulnerables.