El endotelio reivindica su lugar en la COVID persistente como tres años antes lo hizo en la COVID aguda

Autore: Dr. José Sabán Ruiz
Pubblicato: | Aggiornato: 04/09/2023
Editor: Mireia Frias

Cuando hablamos de endotelio nos referimos a la túnica monocelular que reviste el interior de nuestros vasos sanguíneos. Dicha túnica hace de interfaz entre la sangre y el resto del organismo, incluida la propia pared del vaso del que forma parte. Sin corazón no se puede vivir pero está claro que sin endotelio tampoco desde el momento en que la sangre se coagularía y no habría manera de hacer llegar el oxígeno y los nutrientes a las células de todos los tejidos del organismo. Se podría decir mucho más del endotelio pero para entender su papel en la COVID Persistente esto sería en mi opinión suficiente.

 

¿Y qué es la COVID Persistente?

Si definir el endotelio es muy fácil definir la COVID persistente es francamente difícil. En mi opinión la definición de los organismos oficiales es vaga conceptualmente y erra al poner barreras de plazos que en la práctica casi nunca se cumplen porque hay pacientes que comienzan sin solución de continuidad con la fase aguda y otros que comienzan con los problemas muchos meses después sin existir un punto de corte nítido que nos permita decir esto sí lo es, esto no.

 

¿Cuántos tipos de COVID Persistente ve Ud. en su consulta?

Le agradezco que me formule esta pregunta de esta forma tan directa porque voy a ceñirme a lo que yo veo no a lo que leo. Esta enfermedad tiene mucho de bajarse al barro y pelear a diario con la dura realidad, no de verla desde la barrera y lo que yo veo son 5 tipos de Covid Persistente (CP): Los tres más frecuentes serían el post-COVID, el postvacunal y el híbrido, una mezcla de los dos anteriores. Junto a ellos estarían dos grupos muy desconocidos para el público en general y yo diría que por muchos médicos también.

  • El primero de ellos estaría representado por los que presentan el síndrome sin haber sido vacunados en los meses previos ni tener conocimiento de haber pasado una COVID aguda en fechas no lejanas bien porque se tratara de una forma asintomática o silente, paucisintomática (pocos síntomas), atípica (cualquier síntoma que no esté acompañado de cuadro catarral y alteraciones del gusto u olfato) o, ya por último, un “falso negativo” no infrecuente con las nuevas cepas.
  • En segundo lugar, estarían los que acuden a nuestra Consulta de Endotelio atraídos por nuestro programa antiaging o por nuestro programa cardiometabólico o por ambos y que salen con un diagnóstico inesperado de daño endotelial altamente sugestivo de COVID reciente o crónica (indistinguibles muchas veces en los test) por el grado de severidad, nunca antes alcanzado, al menos en nuestra experiencia, por ninguna otra enfermedad.

 

¿Cómo, cuándo y por qué empezó Ud. a interesarse por el endotelio?

Permítanme remontarnos a primeros del siglo XXI y aparecer como por arte de magia en el hospital público de la comunidad de Madrid en el que trabajaba, hospital dónde conseguimos abrir, después de una ardua lucha contra el status quo de la época, la primera Unidad de Endotelio en nuestro país. Rescatando dicha túnica de la biología y llevándola a la cabecera del enfermo, la Unidad fue pensada para ayudar a la genética en la prevención del primer infarto en sujetos de riesgo aportando una combinación inteligente de las dos una mayor predicción, anticipación y precisión a las escalas de riesgo. A ellos se sumaría más de una década más tarde modernas técnicas de imagen y ya en fecha más reciente la lipidómica, que le está costando entrar y derribar barreras ya que poco tiene que ver con la lipidología clínica al uso. A los interesados les remitiría a una conferencia que di en Miami en febrero del 2020, organizada por la SEMAL dentro de unas Jornadas Hispanoamericanas.

 

¿Cuál fue el resultado obtenido en esas más de dos décadas de trabajo en el campo de la Medicina Cardiometabólica?

Sin apenas presupuesto cumplimos con creces, tanto a nivel asistencial como científico, siendo nuestro grupo, durante todo ese tiempo, una de las referencias obligadas de la medicina cardiovascular moderna, y hasta nos dio para la coordinación a nivel nacional de un tratado cardiometabólico/endotelial (Control Global del Riesgo Cardiometabólico. El endotelio como diana preferencial), del que fuimos autores principales, un texto de 2.500 páginas que contó en su prólogo con el respaldo de Valentín Fuster quien lo calificó de “más que único, imprescindible” y eso que nadie imaginábamos que lo mejor para el endotelio estaba por llegar con un virus como coprotagonista.

 

¿Y qué tiene que contarnos sobre el papel jugado por el endotelio en el envejecimiento y si su experiencia en este campo le ayudó para tratar hoy la Covid Persistente?

Las aplicaciones del endotelio en la Medicina Antiaging, en las que también fuimos pioneros, son múltiples y ya en 2008 patentamos la marca Antiaging & Cardiometabolic Health que giraba en torno al endotelio y eso que la teoría endotelial del envejecimiento data de 2010 siendo sus autores Le Couteur y Lakatta, si bien Thomas Sydenhan, en el siglo XVII, ya sostuvo que “el hombre tiene la edad de sus arterias” y Rudolf Altschul escribió un libro en 1954 titulado “el hombre es tan viejo como su endotelio” cuando todavía no se sabía apenas como funcionaba. Animados por el respaldo científico que supuso para nosotros el trabajo de Le Couteur y Lakatta, en 2012 fuimos un paso más allá e hicimos del rejuvenecimiento arterial, naturalmente centrado en el tratamiento del endotelio, el eje de nuestro programa Antiaging, todo un desafío que tuvimos que desarrollarlo en clínicas privadas porque el sistema público tenía entonces y tiene hoy otras prioridades. Respecto al tratamiento, los suplementos que empleábamos para rejuvenecer nuestras arterias son los mismos que estamos aplicando en la COVID Persistente después de llevar testándolos durante más de una década. La excepción serían los senolíticos que son más nuevos y a ellos recurrimos cuando los anteriores resultan insuficientes.

 

¿Qué importancia tiene el endotelio en la COVID aguda?

Me alegra que me haga esta pregunta porque el SARS-CoV2 nunca se fue del todo y me temo que tendremos un virus para años y no cómo gripes, ojalá, seguirá dando guerra, menos, pero la seguirá dando, como ejemplo ahí tiene el reciente brote de Pamplona, y además, mientras nos pueda dejar un regalo envenenado como la CP, merecería un respeto mucho mayor del que se le tiene. Respondiendo, ahora sí, a su pregunta nos retrotraemos a marzo de 2020 y a pesar de que en la COVID aguda un cúmulo de infartos de miocardio y cerebrales así como los tromboembolismos pulmonares, entre otras enfermedades vasculares, se sucedían sin parar, tanto antes del ingreso, durante el mismo, como en sujetos ya dados de alta, solo se hablaba de inmunología. Tenía que haber algo más y así, cuando en mayo del 2020 se publicaron los resultados de las autopsias el tejido más dañado era precisamente el endotelio. Y ello ocurría tanto a nivel micro como macrovascular. Casualmente, a mediados de abril del 2020 yo ya escribía en un Journal Nutrition Health Aging, con mi buen amigo el Dr. Ly-Pen, que era pertinente una evaluación endotelial a todo paciente afectado de la enfermedad aguda.

 

¿Qué factores intervienen en la relación endotelio-COVID aguda?

Intervendría el virus a través de una de sus proteínas estructurales por todos conocida, la proteína S, pero el virus no lo hace solo, también intervienen los neutrófilos agrupados en forma de redes denominadas NETs, determinados factores inmunológicos y 3 de las 16 proteínas virales del grupo de las no estructurales (NSP).

 

En el caso de que exista una endoteliopatía post-COVID, ¿los factores serían los mismos?

En la COVID Persistente (CP), conocida en la literatura anglosajona como Long-COVID, existe igualmente una Endoteliopatía, en este caso post-COVID, pero que a diferencia de la anterior, sería de predominio microvascular, el virus está raramente presente, los factores inmunológicos son algo diferentes, el linfocito y monocito toman el relevo del neutrófilo, entra en escena la angiogénesis, de significación incierta, y ya en fecha muy reciente el papel de las barreras de las que el endotelio siempre forma parte mientras van cambiando el resto de células según el órgano de que se trate, un interesantísimo trabajo publicado en abril de este año, fruto de una colaboración entre investigadores de USA y China. Dicha endoteliopatía podría aparecer, como dije anteriormente, también tras la vacuna y son precisamente estos síndromes post-vacunales los que, en nuestra experiencia, más resistencia muestran a los rehabilitadores endoteliales.

 

¿Qué es esto de los rehabilitadores endoteliales?

El término fue usado por vez primera hace más de dos décadas por el insigne profesor Antonio López Farré para referirse a los suplementos naturales que tienen como diana preferencial el endotelio.

 

Nos consta que es Ud. ponente habitual sobre el tema COVID-Endotelio. ¿Nos podría contar algo al respecto?

En fechas no muy lejanas tuve la oportunidad de desarrollar la hipótesis endotelial de la COVID en una serie de congresos médicos (SEMAL 2022, SIISDET 22, SESAP 2023) y en un curso internacional sobre endotelio de enorme prestigio (IX Curso Internacional de Fisiopatología Endotelial, Lima, Perú). En todos ellos hice un repaso cronológico del papel del endotelio en las dos fases de la enfermedad para detenernos en la fisiopatología de la fase crónica e ilustrar el tramo final de mi ponencia con casos clínicos muy demostrativos vividos por nuestro grupo especialmente en la Clínica d-médical (Madrid), en la que hemos implementado recientemente una consulta on-line pensada solo para esta patología.

 

¿Qué ha cambiado desde su participación en dichos congresos?

Nada. Permítame que sea tan tajante pero es que nos siguen llegando pacientes desesperados con decenas de pruebas y centenares de parámetros de todo tipo entre los que muy raramente vemos alguno que nos proporcione información endotelial.

 

Está claro que es Ud. un firme defensor de abordar la COVID Persistente desde el endotelio pero ¿está Ud. convencido de que se puede revertir solo con esto?

Por supuesto. A falta de otras alternativas científicamente contrastadas, no solo se puede tratar la CP desde el endotelio sino que se debería intentar siempre porque ataca, en mi opinión y en la de muchos autores, la raíz del problema. Imprescindible eso sí el seguimiento para proceder al ajuste personalizado porque no hay dos pacientes iguales. Es ahí donde radica la causa de la mayoría de los fracasos. Sin un seguimiento estrecho no hay curación posible en los casos más severos. También la fortaleza mental, en la que es fundamental el soporte familiar, el mantenimiento de un buen tono físico y cuidar la alimentación son claves a mediano-largo plazo. 

*Tradotto con Google Translator. Preghiamo ci scusi per ogni imperfezione

Dr. José Sabán Ruiz
Medicina interna

*Tradotto con Google Translator. Preghiamo ci scusi per ogni imperfezione

Vedi il profilo

Valutazione generale del paziente


  • Altri trattamenti d'interesse
  • Ozonoterapia
    Mesoterapia
    Malattie sessualmente trasmissibili (MST)
    Bruciature
    Disturbi alimentari
    Disturbi del sonno
    Virus del Papilloma umano (VPH)
    Ipertensione arteriosa
    Insufficienza cardiaca
    Cardiologia preventiva
    Questo sito web utilizza cookie propri e di terze parti per raccogliere informazioni al fine di migliorare i nostri servizi, per mostrarle la pubblicità relativa alle sue preferenze, nonché analizzare le sue abitudini di navigazione. L'utente ha la possibilità di configurare le proprie preferenze QUI.