¿Cómo revitalizar tu relación después del verano?

En verano, las parejas pueden encontrarse sumergidas en un entorno paradisíaco, dejando atrás las preocupaciones laborales y las rutinas habituales. Sin embargo, tal y como explica Sandra Farrera, especialista en Psicología, también ocurren contratiempos, malos entendidos y realmente parece que toleramos menos la frustración.

¿Por qué la terapia de pareja puede reactivar la relación?

El aumento de las consultas de terapia de pareja tras las vacaciones refleja un patrón humano intrigante. La intersección entre las expectativas, las realidades cambiantes y las reflexiones personales contribuye a este fenómeno.

Ante los desafíos y tensiones que emergen después de las vacaciones, muchas parejas encuentran en la terapia de pareja un espacio seguro para abordar sus problemas.

Afortunadamente, la terapia de pareja se alza como una respuesta valiosa y eficaz para ayudar a las parejas a superar estos desafíos y restablecer la armonía en la relación. Proporciona herramientas para enfrentar los desafíos de manera constructiva, fomentando la comunicación, la comprensión mutua y la resolución de conflictos.

¿Cuál es el porcentaje de éxito de la terapia de pareja?

El éxito de la terapia reside en el momento en que se decide buscar ayuda. Si se toma esta decisión a tiempo, al comienzo de la problemática, las posibilidades de éxito son prácticamente garantizadas. Sin embargo, es importante reconocer que una terapia efectiva depende tanto de pacientes comprometidos y colaborativos como de profesionales éticos que desarrollen su labor de manera adecuada.

Tal y como explica Sandra Farrera, septiembre puede ser el mes de reflexión, de quedar una hora y media a la semana para salir a caminar, tomar algo y hablar de temas variados. “Sois un equipo y es importante un diálogo sano y fluido. Comentar temas, pero relacionados con la pareja.” Cuando la pareja lleva tiempo juntos acaba hablando del día a día, del trabajo, de problemas, pero no de ellos/ellas.

Incluso en situaciones donde las parejas optan por poner fin a su relación al concluir las sesiones terapéuticas, la terapia brinda directrices para abordar esta transición de manera civilizada. Esto implica atenuar el dolor emocional y llegar a acuerdos respetuosos en relación a la familia. De este modo, se inicia un proceso de recuperación que abarca tanto la esfera individual como la grupal.

¿Cómo funciona la terapia de pareja?

Durante las sesiones, ambos miembros de la pareja participan conjuntamente en un proceso donde se exploran los problemas iniciales y se examinan los comportamientos que han contribuido al deterioro de la relación.

Se colabora en la adquisición de herramientas fundamentales, como la asertividad, la empatía y técnicas para resolver problemas. La duración de la terapia se ajusta a la naturaleza de los problemas abordados y al momento emocional en el que se encuentren ambas personas en la relación.

Ejercicios para reactivar la relación

Si la pareja quiere mejorar la relación, empezar una nueva etapa y crecer conjuntamente, la psicóloga Sandra Farrera propone en este artículo un ejercicio para reactivar la relación de pareja en 7 semanas:

1. Primera semana: es necesario buscar un día a la semana donde podáis estar solos/solas y si tenéis hijos, dejarlos con un familiar, canguro o quien se preste. Quedar para ir a tomar algo o bien caminar y recordar solo en este encuentro cuándo os conocisteis, cómo fue, qué hacíais entonces, cómo fue el primer beso, cómo os sentíais cuando quedabais… Todo tiene que ser bueno.
   
   Recordar esa época de dopamina, de enamoramiento, de novedad, recordar conjuntamente cómo fue el inicio de vuestra relación. En esta primera salida del ejercicio sólo se pueden recordar cosas buenas (atención selectiva a lo positivo). Si algún miembro de la pareja recuerda algo malo, se para y se vuelve a retomar el hablar de cosas positivas, enriquecedoras para la pareja. 
   
   Es muy importante hacer este ejercicio durante 90 minutos de forma correcta.
   
   Otro aspecto que se instaurará en esta primera etapa son los abrazos. Se terminará el ejercicio con un abrazo y a partir de aquí, cada día: abrazos de “buenos días”, de “me voy a trabajar” de lo que sea, pero abrazos para que genere oxitocina, la hormona de los abrazos que traza vínculos afectivos increíbles.
   
   
2. Segunda semana: durante 90 minutos, la pareja lleva a cabo una nueva salida para tener momentos de intimidad y hablar de cosas buenas que han pasado en sus vidas esa semana. Para eso, han podido hacer por separado una lista diaria y anotar qué cosas buenas les han ocurrido y comentarlas en ese encuentro.
   
   Si la pareja quiere mejorar la comunicación verbal, estaría bien delimitar que durante 5 minutos habla un miembro de la pareja y el otro/a escucha activamente y tras 5 minutos el otro/otra para que sea recíproco hasta que la pareja adquiera ritmo de hablar y escuchar activamente. Pronto, el objetivo se convertirá en rutina que será la base de la recuperación en la pareja.
   
   
3. Tercera semana: la tercera semana es para hacer una actividad que ningún miembro de la pareja haya hecho nunca. Se puede buscar en Google, por ejemplo, “actividades en mi ciudad para hacer con mi pareja”, etc., y ponerse de acuerdo. Si no queréis gastar dinero, id a hacer un pícnic o cualquier actividad nueva y divertida que se os ocurra; ¡sed creativos y tened complicidad! ¡Esto son vitaminas para la pareja!

Sandra Farrera

Es importante acudir a un especialista en Psicología que indique los pasos a seguir y guíe en todo el proceso de cada ejercicio.