La necesidad de sangre segura para trasfusiones es una urgencia a nivel global, que afecta directamente en la vida de millones de personas. Cada día ocurren accidentes y emergencias sanitarias en todo el mundo, por lo que se necesita disponer siempre de sangre segura para salvar vidas. Ante esta situación, en el día Mundial del Donante de Sangre, los organismos de salud unen sus voces para difundir la importancia de donar sangre y hacerlo a menudo.
En esta línea, la Organización Mundial de la Salud (OMS) difunde hoy su campaña “Dona sangre. Dona ahora. Dona a menudo”, haciendo especial hincapié en la urgencia que suponen los accidentes y desastres naturales que ocurren día a día en todo el mundo. Los accidentes y emergencias sanitarias afectan cada año a más de 250 millones de personas. Además. En esta última década, solo los desastres naturales han provocado más de 1 millón de víctimas mortales.
Repartición irregular de las donaciones sangre
Cada año se consiguen 112,5 millones de unidades de sangre en el mundo, siendo la mitad de ellas extraídas en países desarrollados. La población de estos países representa solo un 19% de la población total del planeta, por lo que la necesidad de aumentar las donaciones se da sobre todo en los países subdesarrollados y en vías de desarrollo.
La OMS destaca también la necesidad de un mejor acceso a las donaciones de sangre para todos. Y es que muchos países menos favorecidos no tienen un acceso seguro y eficaz a las donaciones de sangre o no cuentan con los medios necesarios para realizar las donaciones o para analizar la sangre y verificar que es segura para trasfusiones. De esta forma, los países que están más expuestos a enfermedades y accidentes naturales suelen ser también los que tienen menos acceso a las trasfusiones de sangre seguras.
En los países con más ingresos el 76% de las trasfusiones de sangre se utilizan en pacientes mayores de 65 años, normalmente en apoyo de cirugía cardiovascular, trasplantes, traumatismos y tratamientos de tumoresmalignos. En cambio, en los países más desfavorecidos, el 65% de las trasfusiones se utiliza en niños menores de 5 años, expuestos en muchos casos a enfermedades mortales.
Con una sola donación de sangre se puede salvar la vida a varios pacientes, la urgencia es que muchas personas en cualquier punto del mundo pueden necesitar una trasfusión de sangre urgentemente para vivir.
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