¿Qué complicaciones pueden surgir si no se trata una fístula anal a tiempo?
Escrito por:La fístula anal, conocida como fístula en el ano, es un túnel que se forma entre la región interna del ano y la piel exterior que lo rodea. Normalmente, suele aparecer después de la formación de un absceso perianal. El absceso representa la fase aguda, mientras que la fístula anal constituye la fase crónica.
Se trata de una patología infecciosa perianal, por lo tanto, no tratar la fístula puede desencadenar una sepsis perianal y/o una complicación de esta, precisando un tratamiento quirúrgico mucho más complejo.
Detección de la fístula anal
El especialista en Aparato Digestivo realizará una exploración física según la condición de cada paciente a través de las siguientes pruebas:
- Ecografía endoanal: Elevada precisión en manos expertas.
- Resonancia magnética pélvica: Pacientes con enfermedad de Crohn o fístulas muy complejas o multioperadas.
- Manometría anal: Puede ser necesaria en pacientes con clínica o riesgo de incontinencia anal.
- Colonoscopia: Pacientes con sospecha de enfermedad de Crohn o cáncer colorrectal.
¿Qué tipo de técnica se emplea con el objetivo de preservar la función esfinteriana?
Inicialmente se lleva a cabo una exhaustiva exploración del canal anal. Se identifica tanto el orificio externo como el interno, así como el trayecto fistuloso y su relación con el aparato esfinteriano.
La elección del enfoque quirúrgico se basa en la situación específica del paciente, pudiendo incluir opciones como la fistulotomía, la ligadura interesfinteriana del trayecto fistuloso, el cierre láser de la fístula, y el uso de materiales biológicos, como adhesivos de fibrina, "plugs" o tapones, células madre o el plasma enriquecido con plaquetas, entre otros.
La recuperación de la cirugía depende de la complejidad de esta. Se debe explicar al paciente que el tratamiento de una fístula anal, salvo las simples, puede precisar de más de una cirugía. Sin embargo, el postoperatorio suele ser bastante confortable, ya que no precisa largas bajas.
¿Qué cambios en el estilo de vida pueden ayudar a prevenir la recurrencia de una fístula anal?
La fístula anal se origina en la infección de las glándulas de la región anal, por lo que es difícil la prevención. Las dietas ricas en fibra, pobres en grasas y la mejora en la higiene anal podrían mejorar o minimizar sus efectos.
Las fístulas relacionadas con la enfermedad de Crohn requieren de un manejo diferente, precisando de un buen control de la enfermedad de base y teniendo en cuenta la mayor complejidad de las mismas.
