Odontología preventiva: pilar fundamental para una sonrisa radiante
Escrito por:La salud bucal cumple un rol crucial en nuestra salud general y, para conservarla, la Odontología preventiva se erige como el fundamento para mantener dientes y encías en óptimas condiciones. Esta rama de la Odontología se encarga de atajar los problemas dentales desde el principio, sin permitir que se desarrollen de forma profunda y den lugar a condiciones de salud bucal más graves.
A propósito de esto, el especialista en Odontología Alberto Pedernal Alonso dedica este artículo a explicar qué es exactamente la Odontología preventiva y cuál es su importancia para la salud bucal.
¿Para qué sirve la Odontología preventiva?
Tal y como se adelantaba, esta especialidad odontológica concentra sus esfuerzos en la identificación y diagnóstico de condiciones de salud dental de forma preventiva. Es decir, ataja los problemas dentales de manera previa a que estos se conviertan en patologías más graves. De esta manera, se facilita la aplicación de un tratamiento oportuno y menos invasivo.
Con esto, el propósito final es conservar el bienestar bucal del paciente, al mismo tiempo que se previenen afecciones bucales a través del fomento de prácticas saludables y las medidas de previsión.
¿Por qué es importante revisarse la boca regularmente?
Para que la Odontología preventiva funcione, es fundamental que el paciente acuda a su odontólogo de confianza para someterse a revisiones dentales regulares. Durante estas consultas periódicas, el especialista estudiará la salud bucal del paciente, examinando encías, estructuras bucales y dientes por si existiera algún tipo de señal prematura de condiciones de salud dental.
Algunas de las patologías que pueden prevenirse gracias a la Odontología preventiva son:
- Caries.
- Lesiones oclusales.
- Enfermedades periodontales.
- Otras condiciones.
Limpiezas dentales: el mejor aliado de la salud bucal
De la misma manera que las revisiones regulares son fundamentales, las limpiezas dentales cumplen otro rol primordial para el cuidado preventivo de los dientes. En este sentido, estas han de programarse, como mínimo, dos veces cada año.
Aunque los hábitos de higiene, el cepillado y el uso de hilo dental son costumbres cruciales para conservar la salud e higiene de la boca, existe todavía un alto riesgo de acumulación de sarro y placa en zonas de la boca que presenten un difícil acceso.
Por esta razón, los especialistas en higiene dental se encargarán de erradicar cualquier rastro de sarro y placa que se haya acumulado en estas zonas, disminuyendo así la probabilidad de sufrir condiciones como las caries o las enfermedades periodontales. Además, las limpiezas dentales cumplen la función adicional de reducir la halitosis y conservar la dentadura en las mejores condiciones.
¿Cuáles son los hábitos más saludables para lucir una sonrisa radiante?
Si bien los chequeos frecuentes y las limpiezas son estrictamente necesarias para cuidar preventivamente nuestros dientes, es fundamental seguir además las medidas de conducta recomendadas por los especialistas:
- Alimentarse de forma equilibrada. Al llevar una alimentación saludable y rica en nutrientes, los pacientes cuidan de su salud general y dental. Esta medida implica reducir el consumo de azúcares, alcohol, alimentos ácidos y tabaco, ya que todos estos erosionan o manchan el esmalte natural de los dientes y facilitan la aparición de afecciones como las caries, el cáncer oral o las enfermedades periodontales. En su lugar, es preferible optar por comidas que fortalezcan la dentadura, como las hojas verdes, el pescado o los alimentos ricos en calcio.
- Lavarse los dientes adecuadamente. Mantener unos hábitos de cepillado correctos y frecuentes (dos veces al día, como mínimo), durante los cuales el paciente se asegure de repasar todas las superficies dentales y la lengua es crucial para conservar la salud bucal. Este cepillado correcto incluye, además, el uso de cepillos de poca dureza y dentífricos con flúor.
- Tomar medidas de protección durante la práctica de actividades potencialmente perjudiciales. En caso de que el paciente practique alguna actividad deportiva o de riesgo, es recomendable que haga uso de protección bucal para prevenir traumatismos que afecten a la dentadura o las encías.
- Usar hilo dental. Esta herramienta de higiene dental es un aliado muy eficaz para deshacernos de los restos de comida o la placa que puedan acumularse entre las piezas dentales o las encías. La recomendación profesional es usarlo, como mínimo, una vez al día.