La ubicación de un tumor cerebral es clave para su abordaje

Escrito por: Dr. Gerardo Conesa Bertran
Publicado:
Editado por: Patricia Pujante Crespo

Un tumor cerebral es un crecimiento de células dentro de la cavidad intracraneal. Este crecimiento puede ser muy alto en reproducción celular o más bajo. Pueden ser tumores malignos o benignos, y puede que estén dentro del propio cerebro o que estén dentro del cráneo pero fuera del cerebro. Esto serían tumores intrínsecos o, por otra parte, tumores que aprietan el cerebro, que se denominan tumores extrínsecos. Después están los tumores que nacen de la propia cavidad intracraneal, que llamamos primitivos, o los que vienen de fuera, como las metástasis.

 

Infografía o dibujo que muestra un cerebro y sus conexiones - tumores cerebrales - by Top Doctors
Los síntomas y la ubicación del tumor cerebral son clave
para abordarlo y garantizar el éxito de la intervención

 

¿Hay zonas del cerebro más propensas a que se produzca un tumor?

No hay una propensión especial, aunque los tumores más frecuentes son las metástasis que, como se ha citado anteriormente, vienen de “fuera” del cerebro, a diferencia de los tumores denominados primitivos (los que nacen de la propia cavidad craneal). Las metástasis tienen tendencia a ubicarse donde está el cerebro más vascularizado, siendo más frecuente en los hemisferios cerebrales que, también, en cuanto a extensión, es el área más grande.

 

No obstante, no hay una propensión especial para el lóbulo frontal, temporal u occipital. Simplemente, por la extensión que tienen, es más frecuente que sea el frontal, que es el más grande.

 

¿Cómo puede el paciente “notar” que sufre un tumor cerebral?

Hay síntomas cuando hay aumento de la presión dentro de la cabeza y esos síntomas son, básicamente: dolor de cabeza, vómitos y problemas de agudeza visual. Esto lo pueden provocar todos los tumores que se ubican en la cabeza. Después, por el hecho de que estén en una zona o en otra, puede dar síntomas que tienen relación con el sitio del cerebro donde esté ubicado. Por ejemplo, si están en la fosa posterior, en el cerebelo, provocará mareos y una sensación de inestabilidad. Si están localizados en el área del lenguaje, posiblemente provocará algún problema para que el paciente pueda hablar bien. Si se ubican en el área motora tendrá problemas para moverse, etc.

 

Hay otro síntoma, que es irritativo del cerebro, que es la epilepsia. Un adulto, cuando tiene un ataque de epilepsia, hay que descartar que tenga una lesión una lesión expansiva o un tumor.

 

¿Cómo y cuándo debe abordarse un tumor cerebral?

Lo primero es entender en qué categoría de las mencionadas anteriormente se ubica. Si es primitivo o si es metastásico, donde entonces se tendrá que valorar un contexto global de todo el organismo. Después se tiene que valorar si es un tumor que crece muy rápido o lo hace más lentamente. Y, finalmente, la zona donde está. En función de todo esto, el especialista en Neurocirugía diseñará una estrategia específica.

 

Hay algunas lesiones que tienen tratamiento con quimioterapia sin necesidad de operación. Pero, la mayor parte de las veces, lo que hay que hacer es tener una cirugía primero para poder tener una muestra adecuada y saber exactamente el tipo de tumor, además de quitar el máximo de tumor posible, para hacer que haya menos células para poder dar entrada a otra terapia complementaria, algo muchas veces necesario, sobre todo en los tumores malignos.

 

¿Puede dejar secuelas cerebrales un tumor de tales características?

Los tumores por sí mismos a veces pueden hacer sangrados u otros problemas bruscos que después puede costar de recuperar. O bien la propia cirugía, dependiendo de la zona donde se  intervenga, puede tener más riesgos o menos, de una función o de otra. El cerebro es un órgano muy bien organizado y tiene, por tanto, posibilidades de que, tanto en el desarrollo de la enfermedad como por la terapéutica, el paciente pueda tener problemas de muchos tipos: cognitivos, de movimiento, de equilibrio, de sensibilidad… de todo lo que controla el cerebro. El objetivo del neurocirujano es disminuir el tumor al máximo posible teniendo siempre en cuenta el balance de la función cerebral y neurológica del individuo.

Por Dr. Gerardo Conesa Bertran
Neurocirugía

El Dr. Conesa es un prestigioso especialista en Neurocirugía. Cuenta con más de 30 años de experiencia en la profesión y una extensa formación en distintos campos de la especialidad, en numerosos centros de renombre internacional de Estados Unidos y Francia. A lo largo de su trayectoria ha combinado su labor asistencial con la docencia, siendo profesor asociado de Neurocirugía por la Universidad de Barcelona, tutor de residentes de Neurocirugía, profesor del “training commitee” de la EANS (European Association of Neurosurgical Societies) y profesor asociado de Neurocirugía por la Universidad Autónoma de Barcelona.

Ha sido ganador de varios premios en reconocimiento a su carrera profesional e investigadora. Actualmente es socio co-fundador y director de Neurogrup, es jefe de servicio de Neurocirugía en el Hospital del Mar y ejerce práctica privada en el Hospital Quiron y la Clínica Sagrada Familia.

Ver perfil

Valoración general de sus pacientes


  • Tratamientos relacionados
  • Cirugía endoscópica
    Dolor neuropático
    Epilepsia
    Parkinson
    Alzheimer
    Columna
    Rizolisis
    Vertebroplastia
    Hernia discal cervical
    Cirugía de columna
    Este sitio web utiliza Cookies propias y de terceros para recopilar información con la finalidad de mejorar nuestros servicios, para mostrarle publicidad relacionada con sus preferencias, así como analizar sus hábitos de navegación. El usuario tiene la posibilidad de configurar sus preferencias AQUI.