¿Cuáles son las causas por las que el estrés se ha disparado después del confinamiento?

Influyen diversos factores: la incertidumbre económica y laboral, los cambios en las relaciones interpersonales que se han producido durante el confinamiento (en el ámbito de pareja, amistades, familia etc ). También hay que considerar que el estado de inseguridad sanitaria provoca en nosotros reacciones de miedo al contagio y que las normas o pautas que se nos han dado para protegernos del virus en muchos casos han sido cambiantes o poco definidas, por lo que muchas personas viven desde la confusión lo que está pasando.

Además, el estrés puede desembocar en depresión, que puede agravarse si además se han producido muertes cercanas. No obstante todo lo anterior, hay ocasiones en las que estas causas no son tan evidentes y la persona que padece este estrés post-confinamiento debe acudir a un profesional para que le ayude a entender mejor lo que le está sucediendo.

¿Cómo podemos detectarlo?

Es fundamental que hagamos memoria y recordemos como nos encontrábamos antes de que comenzara la pandemia y como es nuestro estado actual. Si notamos en general que estamos más acelerados más tristes o más en guardia, quizá podemos pensar que esos cambios están asociados a la situación de los últimos meses.

¿Qué tratamientos existen para tratar el estrés tras el confinamiento? ¿En qué consisten?

Desde la psicología se puede trabajar desde diferentes enfoques. En mi caso he ayudado a sanitarios y personas que provienen del público en general con diferentes herramientas psicológicas que tiene como objetivo que la persona se sienta con más control de lo que está sucediendo.

Además de las técnicas como la hipnosis o la terapia cognitiva, es fundamental que el paciente verbalice lo que le ocurre y se sienta comprendido y respetado.

Debemos de huir de formas fáciles, tratando al paciente en su individualidad, ya que aunque todos estamos compartiendo los efectos de una pandemia a nivel global, cada persona tiene su estilo para tratar de afrontar lo que le está sucediendo y su historia personal.

¿Qué puede ocurrir si no tratamos este estrés?

El estrés mantenido en el tiempo, sin tratamientos suele ir complicándose cada vez más, como sabemos los profesionales de la salud mental. Produciendo en muchos casos depresión, trastornos de tipo psicofisiológico, dificultades relacionales y un largo etc. El estrés puede afectar también de forma negativa a nuestro sistema inmunológico, que en el momento actual necesitamos que esté en buenas condiciones.