Cáncer de pulmón: importancia del diagnóstico precoz
Escrito por:El cáncer de pulmón surge del crecimiento de células malignas en el aparato respiratorio y, en
concreto, en el tejido pulmonar. Es de los cánceres más frecuentes a nivel mundial, en parte debido al tabaquismo. El diagnóstico precoz influirá positivamente en el tratamiento y en la tasa de curación de la enfermedad.
Importancia de la detección precoz del cáncer de pulmón
El cáncer de pulmón no suele causar síntomas fáciles de identificar en las fases iniciales, lo que hace difícil su detección en estas etapas, entre otros motivos porque no existe ninguna prueba de detección precoz, como sí ocurre con el cáncer de mama.
No obstante, sí que hay ciertos síntomas que alertan de la aparición de un cáncer de pulmón y que merecen acudir a la consulta médica, para una detección lo más pronta posible:
- tos persistente durante más de diez día, sin causa aparente, o empeoramiento de una tos crónica
- sangre en el esputo durante diversos días
- bronquitis persistente - infecciones respiratorias recurrentes
- dificultad para respirar
- dolor torácico
- pérdida de peso o cansancio sin causa aparente
Aunque el cáncer de pulmón puede afectar a cualquier persona, es conveniente extremar las precauciones en personas que hayan fumado durante años, incluso si ya han dejado de fumar, o bien hayan sido fumadoras pasivas, ya que el tabaquismo es el factor de riesgo principal del cáncer de pulmón.
Cómo diagnosticar el cáncer de pulmón
El diagnóstico del cáncer de pulmón debe iniciarse con una radiografía de tórax, con el objetivo de comprobar el origen de los síntomas. Si la radiografía confirma la presencia de células anómalas en el pulmón, se realizarán pruebas de imagen adicionales como la Tomografía Axial Computerizada (TAC) para obtener más información de dichas células.
Para confirmar el diagnóstico, no obstante, es preciso realizar una biopsia y analizarla en el laboratorio y así verificar si las células son cancerosas o no y, en caso afirmativo, determinar el tipo del que se trata. El análisis detallado de las células es imprescindible para un diagnóstico preciso, ya que existen múltiples cánceres de pulmón. En este sentido, existen análisis genéticos que determinan las características moleculares de cada tumor y prescribir el tratamiento más adecuado.
En caso de confirmarse el diagnóstico de cáncer se realizará una nueva prueba de imagen llamada tomografía de positrones o PET, para precisar si el tumor está localizado en su punto de origen o se ha extendido a otros tejidos u órganos. También será preciso un análisis de sangre completo que incluya marcadores tumorales.
El circuito de diagnóstico rápido permite reducir el plazo a una semana entre la primera consulta de un paciente recién diagnosticado o con sospecha de cáncer de pulmón, y el inicio del tratamiento.
Tratamiento del cáncer de pulmón
El tratamiento del cáncer de pulmón debe hacerse de forma individualizada, según las características del tumor y el grado de extensión en el momento del diagnóstico. De ahí que la individualización del tratamiento sea la clave para conseguir la máxima eficacia terapéutica. En este sentido, el objetivo del tratamiento será curativo (eliminar completamente el tumor) o paliativo (prolongar la vida del paciente y reducir el sufrimiento).
En casos en que el cáncer está limitado al lugar de origen se realizará una intervención quirúrgica para extirpar el tumor en su integridad. Posteriormente se administrará un tratamiento con quimioterapia y/o radioterapia para eliminar las células tumorales que puedan haber quedado tras la cirugía. Asimismo, se hará un seguimiento del paciente, especialmente durante los 3 primeros años, consistente en analíticas de sangre completas con marcadores tumorales cada tres meses y pruebas de imagen cada seis meses.
En casos en que el cáncer se ha extendido y la cirugía no permita eliminar las células tumorales, el tratamiento suele basarse en quimioterapia y radioterapia. Son muchos los pacientes que pueden beneficiarse, además, de nuevos fármacos que atacan de forma selectiva a unos tumores u otros, según sus características moleculares.
Unidad de cáncer de pulmón
La unidad de cáncer de pulmón atiende a pacientes con sospecha de un posible cáncer de pulmón que requieren de diagnóstico, así como a pacientes ya diagnosticados pero que acuden para tratamiento. También para obtener segundas opiniones médicas y reorientar el tratamiento individualizado según el tipo de cáncer de pulmón del que se trate, el grado de extensión y las características genéticas y moleculares de las células malignas.
Para obtener el mejor tratamiento de forma personalizada es importante que la unidad de cáncer de pulmón esté conformada por un equipo multidisciplinar formado por oncólogos médicos, neumólogos, radioterapeutas, cirujanos, anatomopatólogos y personal de enfermería. Asimismo, también es esencial la atención psicológica o psiquiátrica a los pacientes que lo necesiten, asesoría en nutrición y medicina complementaria para el tratamiento de la ansiedad y el dolor.
Este equipo facilitará que los pacientes puedan recibir y realizarse todas las pruebas y tratamiento en el mismo lugar y el mínimo tiempo posible.
