Artrosis de tobillo

¿Qué es la artrosis de tobillo?

La artrosis de tobillo es una enfermedad degenerativa de las articulaciones que afecta el tobillo. Es una forma de osteoartritis que se caracteriza por el deterioro progresivo del cartílago que recubre las superficies articulares dentro del tobillo. Esta condición puede causar dolor, rigidez, inflamación y dificultad para mover el tobillo.

La artrosis de tobillo puede ser causada por varios factores, incluyendo lesiones previas en el tobillo, como esguinces graves o fracturas, así como también por el desgaste natural asociado con el envejecimiento. Además, ciertas condiciones médicas, como la artritis reumatoide, también pueden predisponer a alguien a desarrollar artrosis de tobillo.

 

Síntomas de la artrosis de tobillo

Los síntomas de la artrosis de tobillo pueden variar en gravedad y pueden empeorar con el tiempo. Algunos de los síntomas más comunes incluyen:

  • Dolor: el dolor en el tobillo es uno de los síntomas más característicos de la artrosis. Puede variar desde leve a intenso y puede ser constante o intermitente. El dolor tiende a empeorar con la actividad y mejorar con el reposo.
  • Rigidez: la rigidez en el tobillo es otra característica común de la artrosis. Puede experimentarse especialmente por la mañana al levantarse de la cama o después de períodos prolongados de inactividad. La rigidez puede afectar la capacidad para mover el tobillo con normalidad.
  • Inflamación: la inflamación alrededor de la articulación del tobillo es un síntoma frecuente de la artrosis. Esto puede causar hinchazón, enrojecimiento y sensibilidad en la zona afectada.
  • Crepitación: algunas personas pueden experimentar crepitación o crujidos en la articulación del tobillo al moverla. Esto puede ser causado por el roce de los huesos debido al desgaste del cartílago.
  • Dificultad para caminar: a medida que la artrosis progresa y el dolor y la rigidez empeoran, puede volverse más difícil caminar de manera normal. Algunas personas pueden cojear o cambiar su forma de caminar para evitar el dolor.

 

La principal causa de la artrosis de tobillo es la artrosis postraumática, es decir, después de una fractura o un traumatismo en el tobillo.
 


 

Pruebas médicas para artrosis de tobillo

El diagnóstico de la artrosis de tobillo generalmente se realiza mediante una combinación de la evaluación de los síntomas del paciente, el examen físico y pruebas de imagen. Aquí hay algunas pruebas médicas comunes utilizadas para diagnosticar la artrosis de tobillo:

  • Radiografías: las radiografías son una herramienta de diagnóstico clave para evaluar la presencia y el grado de artrosis en el tobillo. Las imágenes de rayos X pueden mostrar el estrechamiento del espacio articular, la formación de osteofitos (espuelas óseas), la erosión del cartílago y otros cambios asociados con la artrosis.
  • Resonancia magnética (RM): la resonancia magnética puede proporcionar imágenes detalladas de los tejidos blandos y las estructuras articulares en el tobillo. Puede ayudar a evaluar la gravedad del daño articular y detectar otros problemas, como lesiones de los ligamentos o del cartílago.
  • Tomografía computarizada (TC): la tomografía computarizada puede ser útil para evaluar con mayor detalle la anatomía del tobillo, especialmente en casos en los que la radiografía o la resonancia magnética no proporcionan información suficiente.
  • Análisis de líquido sinovial: en algunos casos, se puede realizar una aspiración de líquido sinovial de la articulación del tobillo para analizar si hay signos de inflamación o presencia de cristales que puedan indicar otros tipos de artritis.
  • Escala de evaluación de la artrosis: además de las pruebas de imagen, los médicos también pueden utilizar escalas de evaluación específicas para la artrosis, que incluyen preguntas sobre los síntomas del paciente, la función articular y el impacto en la calidad de vida.

Estas pruebas médicas ayudan a los médicos a confirmar el diagnóstico de artrosis de tobillo, evaluar la gravedad de la afección y planificar el tratamiento más adecuado para cada paciente. Es importante que el diagnóstico y el plan de tratamiento sean realizados por un médico especializado en ortopedia o reumatología.

 

¿Cuáles son las causas de la artrosis de tobillo?

Las principales causas de esta patología crónica son:

  • Artrosis postraumática: se produce después de una fractura o un traumatismo en el tobillo. Es la principal causa de artrosis de tobillo
  • Alteraciones metabólicas o reumatológicas: los pacientes que sufren la hiperuricemia o gota pueden provocar una artrosis de tobillo por el acúmulo de microcristales en la articulación. Además, alteraciones reumatológicas como la artritis reumática puede alterar la articulación del tobillo hasta llegar a la artrosis de tobillo.
  • Alteraciones del pie: pacientes con pie plano o pie cavo severo pueden padecer artrosis de tobillo, debido a la alteración en el movimiento de la articulación.
     

¿Se puede prevenir?

Algunos consejos para la prevención de la artrosis de tobillo son:

  • Modificar la actividad: se desaconsejan deportes de contacto, carrera, salto y giro. Por contra, la musculación, hacer ejercicio en la piscina y la bicicleta son muy recomendables para mantener la movilidad y la fuerza.
  • Evitar en sobrepeso corporal.
  • Utilizar un buen calzado es importante para la salud de las articulaciones y de los pies.

 

Pronóstico de la enfermedad

La artrosis de tobillo no es una enfermedad muy habitual, podría decirse que es excepcional y casi siempre aparece después de una fractura de la pierna o del pie. No ocurre lo mismo con la artrosis de cadera o la de rodilla, más habituales.

Igualmente, la persona que padece artrosis de tobillo tendrá una capacidad de movimiento muy limitado.

 

Tratamientos para artrosis de tobillo

El tratamiento inicial de la artrosis de tobillo consiste en el uso de plantillas para acomodar mejor el pie y reducir la fuerza de impacto de la marcha en el tobillo.

Un tratamiento más novedoso es el de las infiltraciones de plasma rico en factores de crecimiento, que regeneran los tejidos dañados y pueden “ frenar” el desgaste articular.

En casos más avanzados se recomienda la cirugía, como la cirugía de mínima incisión del pie; y en otros se puede optar por implantar una prótesis de tobillo, es decir, realizar una artroplastía total de tobillo (ATT).
 

¿Qué especialista lo trata?

Los especialistas en Traumatología se encargan de la artrosis de tobillo.

16-02-2024
Top Doctors

Artrosis de tobillo

Dra. Lucía Martín Romero - Traumatología

Creado el: 13-11-2012

Editado el: 16-02-2024

¿Qué es la artrosis de tobillo?

La artrosis de tobillo es una enfermedad degenerativa de las articulaciones que afecta el tobillo. Es una forma de osteoartritis que se caracteriza por el deterioro progresivo del cartílago que recubre las superficies articulares dentro del tobillo. Esta condición puede causar dolor, rigidez, inflamación y dificultad para mover el tobillo.

La artrosis de tobillo puede ser causada por varios factores, incluyendo lesiones previas en el tobillo, como esguinces graves o fracturas, así como también por el desgaste natural asociado con el envejecimiento. Además, ciertas condiciones médicas, como la artritis reumatoide, también pueden predisponer a alguien a desarrollar artrosis de tobillo.

 

Síntomas de la artrosis de tobillo

Los síntomas de la artrosis de tobillo pueden variar en gravedad y pueden empeorar con el tiempo. Algunos de los síntomas más comunes incluyen:

  • Dolor: el dolor en el tobillo es uno de los síntomas más característicos de la artrosis. Puede variar desde leve a intenso y puede ser constante o intermitente. El dolor tiende a empeorar con la actividad y mejorar con el reposo.
  • Rigidez: la rigidez en el tobillo es otra característica común de la artrosis. Puede experimentarse especialmente por la mañana al levantarse de la cama o después de períodos prolongados de inactividad. La rigidez puede afectar la capacidad para mover el tobillo con normalidad.
  • Inflamación: la inflamación alrededor de la articulación del tobillo es un síntoma frecuente de la artrosis. Esto puede causar hinchazón, enrojecimiento y sensibilidad en la zona afectada.
  • Crepitación: algunas personas pueden experimentar crepitación o crujidos en la articulación del tobillo al moverla. Esto puede ser causado por el roce de los huesos debido al desgaste del cartílago.
  • Dificultad para caminar: a medida que la artrosis progresa y el dolor y la rigidez empeoran, puede volverse más difícil caminar de manera normal. Algunas personas pueden cojear o cambiar su forma de caminar para evitar el dolor.

 

La principal causa de la artrosis de tobillo es la artrosis postraumática, es decir, después de una fractura o un traumatismo en el tobillo.
 


 

Pruebas médicas para artrosis de tobillo

El diagnóstico de la artrosis de tobillo generalmente se realiza mediante una combinación de la evaluación de los síntomas del paciente, el examen físico y pruebas de imagen. Aquí hay algunas pruebas médicas comunes utilizadas para diagnosticar la artrosis de tobillo:

  • Radiografías: las radiografías son una herramienta de diagnóstico clave para evaluar la presencia y el grado de artrosis en el tobillo. Las imágenes de rayos X pueden mostrar el estrechamiento del espacio articular, la formación de osteofitos (espuelas óseas), la erosión del cartílago y otros cambios asociados con la artrosis.
  • Resonancia magnética (RM): la resonancia magnética puede proporcionar imágenes detalladas de los tejidos blandos y las estructuras articulares en el tobillo. Puede ayudar a evaluar la gravedad del daño articular y detectar otros problemas, como lesiones de los ligamentos o del cartílago.
  • Tomografía computarizada (TC): la tomografía computarizada puede ser útil para evaluar con mayor detalle la anatomía del tobillo, especialmente en casos en los que la radiografía o la resonancia magnética no proporcionan información suficiente.
  • Análisis de líquido sinovial: en algunos casos, se puede realizar una aspiración de líquido sinovial de la articulación del tobillo para analizar si hay signos de inflamación o presencia de cristales que puedan indicar otros tipos de artritis.
  • Escala de evaluación de la artrosis: además de las pruebas de imagen, los médicos también pueden utilizar escalas de evaluación específicas para la artrosis, que incluyen preguntas sobre los síntomas del paciente, la función articular y el impacto en la calidad de vida.

Estas pruebas médicas ayudan a los médicos a confirmar el diagnóstico de artrosis de tobillo, evaluar la gravedad de la afección y planificar el tratamiento más adecuado para cada paciente. Es importante que el diagnóstico y el plan de tratamiento sean realizados por un médico especializado en ortopedia o reumatología.

 

¿Cuáles son las causas de la artrosis de tobillo?

Las principales causas de esta patología crónica son:

  • Artrosis postraumática: se produce después de una fractura o un traumatismo en el tobillo. Es la principal causa de artrosis de tobillo
  • Alteraciones metabólicas o reumatológicas: los pacientes que sufren la hiperuricemia o gota pueden provocar una artrosis de tobillo por el acúmulo de microcristales en la articulación. Además, alteraciones reumatológicas como la artritis reumática puede alterar la articulación del tobillo hasta llegar a la artrosis de tobillo.
  • Alteraciones del pie: pacientes con pie plano o pie cavo severo pueden padecer artrosis de tobillo, debido a la alteración en el movimiento de la articulación.
     

¿Se puede prevenir?

Algunos consejos para la prevención de la artrosis de tobillo son:

  • Modificar la actividad: se desaconsejan deportes de contacto, carrera, salto y giro. Por contra, la musculación, hacer ejercicio en la piscina y la bicicleta son muy recomendables para mantener la movilidad y la fuerza.
  • Evitar en sobrepeso corporal.
  • Utilizar un buen calzado es importante para la salud de las articulaciones y de los pies.

 

Pronóstico de la enfermedad

La artrosis de tobillo no es una enfermedad muy habitual, podría decirse que es excepcional y casi siempre aparece después de una fractura de la pierna o del pie. No ocurre lo mismo con la artrosis de cadera o la de rodilla, más habituales.

Igualmente, la persona que padece artrosis de tobillo tendrá una capacidad de movimiento muy limitado.

 

Tratamientos para artrosis de tobillo

El tratamiento inicial de la artrosis de tobillo consiste en el uso de plantillas para acomodar mejor el pie y reducir la fuerza de impacto de la marcha en el tobillo.

Un tratamiento más novedoso es el de las infiltraciones de plasma rico en factores de crecimiento, que regeneran los tejidos dañados y pueden “ frenar” el desgaste articular.

En casos más avanzados se recomienda la cirugía, como la cirugía de mínima incisión del pie; y en otros se puede optar por implantar una prótesis de tobillo, es decir, realizar una artroplastía total de tobillo (ATT).
 

¿Qué especialista lo trata?

Los especialistas en Traumatología se encargan de la artrosis de tobillo.

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