Test sensibilidad alimentaria para Intolerancias alimentarias

El alergólogo, especialista en patologías alérgicas, primero realiza un examen físico y preguntas sobre los síntomas. A continuación, se realizan las siguientes pruebas:
 

• Prueba de tolerancia oral: se le da al paciente pequeñas cantidades del alimento que se sospecha que causa la alergia. El alimento se puede dar en cápsulas o por inyección. El especialista realiza la observación por si se produce alguna reacción alérgica. Si es así, se aplica un tratamiento inmediato.

 

• Dieta de eliminación: se realiza este tipo de dieta para averiguar qué alimentos específicos son los causantes de una alergia. Primero se eliminan todos los alimentos sospechosos de la dieta del paciente. Luego se añaden estos alimentos uno a uno para ver cuál provoca una reacción. La dieta no indica si la reacción se debe a una alergia o a una sensibilidad alimentaria. Este tipo de dieta no se recomienda cuando la alergia es grave.

 

• Prueba del pinchazo en la piel: el especialista coloca un poco del alimento sospechoso en la piel del antebrazo o la espalda. Luego, se pincha delicadamente la piel con una aguja para permitir que entre una cantidad muy pequeña del alimento. Si se forma una protuberancia roja que pica en el lugar del pinchazo puede ser que el paciente sea alérgico a ese alimento.

 

• Análisis de sangre: esta prueba detecta sustancias llamada anticuerpos IgE en la sangre. El sistema inmunitario produce este tipo de anticuerpos cuando la persona está expuesto a una sustancia que provoca una reacción alérgica. El especialista se queda con una muestra de sangre para analizarlo.

La prueba de las alergias alimentarias se utiliza para averiguar si existe una alergia a un alimento específico. También se pueden utilizar para averiguar si se trata realmente de una alergia o es solo una sensibilidad a un alimento concreto.
 
La sensibilidad alimentaria, que también se pueden conocer como la intolerancia alimentaria, se puede confundir con la alergia alimentaria. A veces las dos afecciones pueden tener síntomas parecidos, pero las complicaciones pueden ser muy diferentes.
 
Cuando existe una sensibilidad alimentaria el cuerpo no puede digerir bien un alimento específico o causa malestar en el aparato digestivo. Los síntomas se pueden limitar principalmente a problemas digestivos como dolor abdominal, náuseas, gases y diarrea.

La prueba puede causar desde molestias, picor o irritación en la piel, hasta alguna reacción alérgica grave, por eso es necesario hacerse con la supervisión de un alergólogo.

En cuanto al análisis de sangre, los riesgos son mínimos, solo se puede sentir dolor leve o que salga un pequeño hematoma en la zona.

Unos resultados anormales significarán que existe algún tipo de alergia alimentaria. Si los resultados son positivos, el tratamiento consistirá en eliminar ese alimento de su dieta para así evitar reacciones alérgicas.

Actualmente, se están estudiando nuevas terapias para prevenir las reacciones alérgicas graves, como la Inmunoterapia oral, que consiste en comer cantidades pequeñas de los alimentos que causan la alergia aumentando su ingesta de forma gradual y la epicutánea que, en lugar de comer un alimento específico, se administra una proteína de ese alimento a través de un parche en la piel que se va cambiando diariamente con cantidades cada vez mayores de la misma proteína.