Ejercicios de rehabilitación con prótesis de rodilla

Tras ser intervenido con una Prótesis Total de Rodilla, el paciente debe seguir las instrucciones de su cirujano en cuanto a las precauciones y ejercicios que realizar, ya que los ejercicios de rehabilitación de ayudarán a recuperarse de la cirugía y aprovechar al máximo su nueva articulación.

A continuación se presentan consejos prácticos y ejercicios para el paciente con prótesis de rodilla, que pueden serle de utilidad sobre todo durante las primeras semanas tras la cirugía para recuperar la movilidad y autonomía en su día a día.

Consejos prácticos en el día a día tras la prótesis de rodilla

Durante los primeros días tras la intervención quirúrgica:

• Colocar en la como una toalla doblada debajo del tobillo y mantener estirada la rodilla al menos 5 minutos cada hora, unas tres o cuatro veces al día.
• Para levantarse de la cama, acercarse al borde y girar las caderas, así como ponerse de pie con las muletas y apoyando siempre la pierna sana, así como para acostarse es fundamental seguir el mismo procedimiento a la inversa y no apoyar nunca la pierna recién intervenida.

• La movilización precoz es fundamental para evitar trombosis, por tanto es importante empezar enseguida los ejercicios de rehabilitación. A partir del primer día, el el especialista puede ayudar al paciente a empezar a sentarse en una silla y andar con muletas.

• La recuperación de la marcha se va consiguiendo poco a poco, bajo el asesoramiento del cirujano.
• Para sentarse, mejor escoger una silla alta y estable, fija y a poder ser con reposabrazos, y acercarla hasta las piernas, para entonces sentarse manteniendo la pierna operada extendida.

Tras recibir el alta, una vez en casa:

• A los 3-7 días de la operación, una vez en casa el paciente puede valerse por sí mismo en el hogar, aunque puede ser útil la ayuda de familiares los primeros días.
• Para lavarse se recomienda la ducha en vez de la bañera, y sujetarse si es posible al entrar y al salir. Dentro de la ducha puede ponerse una silla o taburete para que le sea más cómodo ducharse sentado, así como una alfombrilla antideslizante para no resbalar. Conviene no agacharse para lavarse ni secarse, y en cuando a la higiene de la herida quirúrgica, seguir las indicaciones del cirujano.
• Se aconseja utilizar siempre zapatos cerrados que se agarren bien al pie y con suelas antideslizantes, así como zapatillas con velcro o zapato, que evite tener que anudar los cordones. Se desaconsejan totalmente los zapatos de tacón.

• El paciente deberá seguir una medicación específica recetada por el cirujano, así como acudir al especialista si se inflama la herida, coge fiebre, le cuesta respirar, tiene taquicardia u otros síntomas repentinos de enfermedad.

A partir del segundo mes con prótesis de rodilla:

• Para conducir, es prudente empezar a coger de nuevo el coche tras el segundo mes de haber sido operado. Es mejor que utilice los asientos delanteros con el respaldo hacia atrás y evitando flexionar demasiado la pierna, así como los movimientos bruscos y giros de la misma.
• El Código de Circulación prohíbe conducir con inmoviliaciones como las muletas, así que el paciente deberá esperar a conducir una vez ya no use las muletas.

 Ejercicios de rehabilitación tras la prótesis de rodilla

Los ejercicios de rehabilitación tras una cirugía de prótesis de rodilla son fundamentales para recuperar la movilidad y la fuerza muscular, y por tanto para poder volver a hacer vida normal. También pueden ayudar a disminuir el dolor y molestias del postoperatorio. Por ello, es necesario que siga las instrucciones del cirujano y el fisioterapeuta y realizar ejercicios durante 20 o 30 minutos dos o tres veces diarias. También es saludable caminar una media hora dos o tres veces por semana.

Durante el primer mes tras la operación

• Contraer el cuádriceps: tirar la rodilla hacia atrás contrayendo el muslo y mantenerlo tensado entre 5 y 10 segundos. Repetir durante 5 minutos, tres o cuatro veces al día.
• Levantar la pierna estirada: contraer el cuádriceps y levantar la pierna estirada estando tumbado en la cama, mantener 5 o 10 segundos y bajar la pierna. Repetir durante 5 minutos.

• Flexo-extensión de tobillo: para activar la circulación venosa, mover el pie arriba y abajo durante 2 o 3 minutos, dos o tres veces cada hora.
• Extensión de la rodilla: es importante evitar la extensión total de la rodilla, así que el paciente puede colocar una pequeña toalla enrollada detrás del tobillo y tirar la rodilla hacia atrás, manteniendo la contracción del cuádriceps unos 5 o 10 segundos. Repetir varias veces al día.
• Doblar la rodilla: tumbado en la cama boca arriba, doblar la rodilla todo lo posible deslizando el pie sobre la cama, aguantar 10 segundos y estirar; repitiendo varias veces al día. También estando sentado en el borde de la cama se puede dejar colgada y estirar y doblar a favor de la gravedad.

Ejercicios de rehabilitación a partir del segundo mes de la operación: 

• La actividad física es beneficiosa en este punto para recuperar la normalidad. Caminar, la natación y la bicicleta son algunos deportes recomendados, así como los deportes de contacto o de mayor riesgo de lesión como el fútbol o el esquí no se recomiendan en este punto. 
• Ejercicios de cuádriceps: sentado en una silla y con la espalda recta, estirar la pierna en horizontal y mantener unos 10 segundos. Repetir hasta 10 veces mañana y tarde. También reposar la pierna en un reposapiés y empujar con el talón durante 10 segundos. Repetir hasta 10 veces mañana y tarde.
• Estiramientos de la cara anterior del muslo: para mejorar la flexión, estirarse boca abajo y cruzar las piernas. Doblar las rodillas acercando al máximo los tacones a los glúteos. Mantener durante 10 segundos y repetir hasta 10 veces mañana y tarde.

• Estiramientos de la cara posterior del muslo: para mejorar la extensión, sentado en una silla apoyar el talón en otra silla delante con la rodilla estirada. Tirar con el pie hacia uno mismo estirando al máximo la rodilla y aguantar 10 segundos. Repetir hasta 10 veces mañana y tarde.

• Ejercicios con peso: los ejercicios anteriormente descritos se pueden realizar también colocando un peso sobre el tobillo, que no será superior a 2 kgs al principio, y puede aumentar progresivamente hasta los 8 kgs al final.

Prevenir el tromboembolismo venoso con una prótesis de rodilla

La cirugía de prótesis de rodilla es de alto riesgo tromboembólico, así que es importante prevenirlo mediante los métodos físicos y farmacológicos:

• Métodos físicos: son ejercicios que el paciente debe realizar ya desde el postoperatorio inmediato, y consisten en:
  • Ejercicios en cama: mover los tobillos con flexión dorsal, es decir, tirando el pie hacia arriba, durante 3 segundos y a continuación la flexión plantar tirando el pie hacia abajo otros 3 segundos. Realizar 10 repeticiones. Otro ejercicio es el de contraer los glúteos durante 3 segundos y relajarlos otros 3 segundos, con 10 repeticiones.
  • Uso de medias elásticas de compresión: son muy útiles pero deben llevarse siempre con un zapato adecuado, y lavarlas a mano.

• Métodos farmacológicos: el especialista cirujano dará instrucciones sobre los medicamentos necesarios, que habitualmente constan de heparina en inyecciones o los actuales anticoagulantes orales. Este tratamiento de prevención puede extenderse hasta 6 semanas tras la operación.