Cuándo acudir a terapia psicológica: signos de alerta que no debemos ignorar

Actualmente se habla mucho del creciente protagonismo que está adquiriendo la salud mental y la terapia psicológica en nuestra sociedad. Las secuelas psicológicas de la pandemia, todavía latentes, han revelado un problema de salud mental en España, que ya se encontraba al borde del colapso.
 

Los jóvenes adultos son la franja más afectada según las estadísticas, aunque también es la que antes ha asumido que no solamente tenemos que cuidar bien nuestro cuerpo, sino que la mente es una parte fundamental para que todo nuestro organismo funcione correctamente. De esta forma conseguiremos sentirnos satisfechos con nosotros mismos, tanto por dentro como por fuera.

Mitos y leyendas urbanas sobre la terapia psicológica

En muchos casos todavía se tienen creencias preconcebidas sobre las consultas a los especialistas en Psicología, y estas no se ajustan a la realidad. A continuación, te muestro algunas de ellas:
 

• “Al psicólogo solo van los que están mal de la cabeza”

Incorrecto: todas las personas podemos necesitar acudir a una consulta en algún momento, para recibir orientación o tratamiento de un experto. Un psicólogo puede acompañarte en múltiples situaciones, como en la solución de problemas, afrontamiento, regular sus emociones, comprenderse mejor, gestionar miedos, obsesiones, mejorar sus relaciones, aliviar su angustia, mejorar el estado de ánimo, adicciones, etc.
 

• “Solo se puede confiar en los médicos, la Psicología no está avalada por la ciencia”

Incorrecto: la Psicología sí es una ciencia. Forma parte de las Ciencias de la Salud, está avalada por el método científico y tiene evidencia empírica. Los métodos y técnicas que se emplean en terapia están contrastados y valorados por su nivel de eficacia.
 

• “En la consulta solo tengo que tumbarme en el diván y desahogarme para que alguien me escuche”

Incorrecto: es un concepto que hemos visto en películas y series americanas donde aparecen psicoanalistas. En España los pacientes realizan las terapias psicológicas sentados y mirando al terapeuta. En este sentido, se trata de un trabajo conjunto del paciente y terapeuta donde ambos se comunican, por lo que la persona participa de manera activa y pone en práctica herramientas que debe aprender a manejar para después aplicarlas en su vida diaria.

¿Cuándo acudir a terapia psicológica?

En muchas ocasiones no sabemos cuándo es el momento adecuado para acudir a una consulta de terapia psicológica. Solemos minimizar nuestros problemas pensando que lo que nos pasa es normal y que se solucionará con el paso del tiempo o con medicación.
 

La terapia psicológica se basa en un estudio detallado sobre tu caso. El psicólogo/a evalúa todos los factores que influyen en lo que te ocurre y planificará contigo las técnicas más adecuadas para abordar de raíz lo que te sucede. Durante el proceso puedes entender el origen, las causas que mantienen y agravan el problema, las respuestas que funcionan y aquellas que no. La terapia te proporcionará las herramientas necesarias para ayudarte a lo largo de tu vida.
 

Algunos signos de alerta que nos pueden revelar que necesitamos ayuda de un terapeuta son:
 

• Llevo tiempo que no duermo bien o que tardo mucho en conciliar el sueño.
• Últimamente he sentido una falta de apetito o descontrol en mi manera de alimentarme.
• He abandonado actividades que antes me agradaban porque no me apetece hacer casi nada o no disfruto con ellas.
• Siento que no encajo en mi entorno y que las personas me evitan.
• No paro de pensar en preocupaciones y tengo que estar siempre activo para así no pensar.
• Tengo molestias crónicas gastrointestinales, asma, jaquecas, dolores musculares, dermatitis, etc. que empeoran cuando me estreso o me altero.
• En ocasiones evito algunas situaciones porque me falta el aire, me dan sudores, palpitaciones y temblores y me da miedo sufrir un infarto.
   

Estos son solo algunos ejemplos de que algo no está funcionando bien y que quizá necesitemos ayuda para gestionarlo. No todo se soluciona con medicación, ya que algunos síntomas superficiales pueden mejorar a corto plazo (sueño, ansiedad, etc.), pero no resuelven el problema de base y los síntomas pueden volver cuando dejes los medicamentos.

¿Cómo elijo un psicólogo con quien me sienta cómodo?

No todos los profesionales de la Psicología tienen las mismas formas de trabajar ni las mismas técnicas. Existen distintos enfoques para llevar a cabo la terapia psicológica y puedes escoger la que mejor se ajuste a lo que tú quieres y necesitas.
 

Aquí tienes algunos consejos para tener en cuenta a la hora de elegir un profesional de confianza:
 

• Asegúrate que acudes a psicólogos generales sanitarios o psicólogos clínicos.
• Pregunta si están especializados en tu problema.
• No des prioridad al precio en tu bienestar y salud mental. Desconfía de las ofertas y “chollos”.
   

En Lucentum Psicología somos un equipo de profesionales especializados con una amplia formación y experiencia, lo que nos hace expertas en nuestras áreas.