Detección y tratamiento de quistes maxilares
Autore:La detección y el tratamiento de las lesiones bucales es esencial para garantizar la salud a largo plazo. En este artículo, explicaremos qué son quistes maxilares y cómo se tratan en la Clínica Dental Puyuelo.
¿Qué es y cómo se detecta un quiste maxilar?
Un quiste maxilar se presenta como una bolsa en el maxilar superior o la mandíbula, conteniendo líquido, aire u otros materiales. A menudo, estos quistes son indoloros y en sus primeras etapas pueden pasar desapercibidos.
Se pueden detectar con análisis radiológicos periódicos, como la ortopantomografía (radiografía en 2D de toda la boca), que revela la presencia del quiste como una zona oscura y redondeada. Para un diagnóstico más preciso, se puede realizar un TAC (radiografía en 3D) que muestra el volumen de la lesión.
Es fundamental detectar estos quistes en sus fases iniciales, ya que, en casos avanzados, pueden causar deformaciones óseas, infecciones, movilidad dental e incluso la ruptura del maxilar en situaciones extremas.
¿Por qué aparecen los quistes maxilares?
Los quistes maxilares pueden ser causados por diversos motivos, entre ellos, la genética. En el caso de los niños, un desarrollo dental anómalo puede dar lugar a quistes cuando un diente no erupciona correctamente. Además, las caries profundas que alcanzan el nervio pueden provocar infecciones que se extienden al hueso, formando quistes radiculares.
Traumatismos faciales, infecciones y disfunciones en las glándulas salivales también pueden desencadenar la formación de quistes maxilares. La variedad de causas subraya la importancia de una atención odontológica integral y preventiva.
Clasificación de los quistes maxilares
Los quistes maxilares se dividen en odontogénicos, relacionados con estructuras dentales, y no odontogénicos. Entre los odontogénicos se encuentran el quiste radicular, residual, paradental, folicular, de erupción y queratoquiste, mientras que los no odontogénicos incluyen el quiste naso-palatino, palatino medio, glóbulo-maxilar, naso-labial y medio mandibular.
En la imagen adjunta (corte de un TAC en 3D), se aprecia un quiste naso-palatino, uno de los más comunes en la cavidad oral, manifestándose como una sombra negra detrás de los dientes.
Diagnóstico y tratamiento
El enfoque adecuado para tratar un quiste maxilar depende de su origen. En casos vinculados a infecciones dentales se puede optar por una endodoncia y/o cirugía apical. La endodoncia implica eliminar las bacterias de la raíz dental, mientras que la cirugía apical extirpa la punta de la raíz junto con el quiste. En quistes pequeños, la endodoncia puede ser suficiente, siendo menos invasiva, pero en casos más complejos, la cirugía apical o ambas intervenciones pueden ser necesarias.
Para quistes extensos o de crecimiento rápido, la técnica de enucleación se utiliza para eliminar completamente la lesión y su encapsulación, evitando su reaparición. Durante estos procedimientos, se administra anestesia local para garantizar la comodidad del paciente. Posteriormente, se proporciona una pauta analgésica para el postoperatorio, facilitando la recuperación.
Nuestro equipo multidisciplinario, respaldado por tecnología 3D y especialistas en endodoncia y cirugía, evaluará cada caso para determinar el mejor tratamiento personalizado, una atención integral, preservar la salud bucal y prevenir complicaciones futuras.
