La especialidad de Cirugía Plástica, Estética y Reparadora es la única titulación válida para ejercer esta profesión. Aun así, existen varios casos de intrusismo, es decir, de personas que no tienen esta cualificación y se autodenominan cirujanos estéticos, cirujanos cosméticos u otras denominaciones engañosas que en realidad no existen.
Con esta reflexión la doctora Nélida Grande, Cirujano plástico y miembro de Top Doctors®, valora los últimos datos publicados por la SECPRE que asocian al intrusismo y a la crisis la importante caída que han sufrido las intervenciones de esta especialidad en España, un 18% en el 2013. “Confiar en profesionales no cualificados supone un peligro para el paciente”, recuerda la doctora Grande. Para asegura las referencias de los profesionales la SECPRE o la AECEP tienen en sus respectivas páginas web el contacto de todos los miembros por cada provincia. De igual modo, los colegios de médicos pueden facilitar información de los doctores que hayan registrado su título.
Otra pista para diferenciar a un buen especialista de uno fraudulento es su dinámica de trabajo, dice la doctora Grande. Un buen cirujano no promete milagros ni procedimientos fáciles y sin esfuerzo. Además, un verdadero cirujano le desaconsejará una operación que a corto o largo plazo le pueda resultar perjudicial, tanto física como psíquicamente. También intentará que alguien con personalidad inestable, con una visión distorsionada de su propio cuerpo o que entre en el quirófano influenciado por su pareja desiste de realizarse una intervención.
La SECPRE lucha ahora por endurecer las leyes españolas. Mientras que en Francia o Austria estos casos de intrusismo se consideran delito penal en España se penalizan con multas.
Para tranquilizar a los pacientes, la doctora Nélida Grande concluye con que si el paciente se informa debidamente sobre la formación de su cirujano y elige a un profesional con la titulación exigida, miembro de algunas de las sociedades de prestigio y con ética, experiencia y empatía, no correrá riesgos innecesarios al depositar su confianza en él, ya que, si surge una complicación, ésta será debidamente atendida.
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