El tratamiento definitivo para decir adiós a las estrías

Las estrías están producidas por una distensión de la piel excesiva y rápida en la que la dermis se atrofia o se rompe. En muchas ocasiones se localizan en las mamas, el abdomen, las caderas y/o los muslos.

Existen diferentes tipos de estrías dependiendo de la fase en la que se encuentren:

• Fase aguda en la que las estrías aparecen como lesiones rojas o violáceas que pueden elevarse y son sintomáticas.
• Fase crónica que son depresiones dérmicas hipopigmentadas.

¿Qué tratamientos existen?

El tratamiento de las estrías se ha convertido en un reto para los expertos en Medicina y Cirugía plástica. Muchos de los tratamientos que existen para esta patología se basan en intentar engrosar la capa de la piel que ha sufrido la rotura o el adelgazamiento brusco. Existen diferentes opciones de tratamiento, aunque son poco efectivas si se utilizan de forma aislada y en monoterapia.

Tratamientos tópicos que se dividen en dos tipos:

• Ácido retinoico: ayuda aumentando el grosor de la dermis y potencia la producción de colágeno en la piel. Se usa como tratamiento complementario, ya que si se utiliza de manera aislada no tendrá los resultados deseados.
• Ácido hialurónico: incrementa la producción de colágeno y se han demostrado las mejoras en la piel después de usarlo.

Tratamientos de exfoliación química: Los tratamientos de exfoliación química se basan en la aplicación de ácido tricloroacético o ácido glicólico. Esto induce a una respuesta inflamatoria inicial que provoca la disminución en el ancho del surco de las estrías. Los resultados son mejores cuando se utiliza combinándolo con otros tratamientos (láser, terapia percutánea de inducción de colágeno y bioestimulación dérmica)

Radiofrecuencia: Los dispositivos de radiofrecuencia suministran corriente de radiofrecuencia a la piel, lo que se traduce como calor en la dermis como resultado de su resistencia eléctrica. Tras la desnaturalización del colágeno con su uso, se produce un aumento posterior de la producción de colágeno.

Láseres fraccionales: los láseres fraccionales emiten rayos microscópicos de energía luminosa monocromática y coherente a la piel. Esto crea áreas de daño térmico llamadas zonas microtérmicas. Esto aumenta la producción de colágeno y elastina de la dermis.

¿Cuándo se ven los resultados en los pacientes?

En Institut Ruíz Castilla tratan, desde hace poco más de 2 años, las estrías con ResurFX®, un láser fraccional no ablativo. Este láser no daña la piel, además de que el paciente no tiene que realizar ningún cuidado entre sesiones, excepto evitar la exposición solar y aplicarse crema hidratante. La comodidad del tratamiento frente a otros tratamientos ablativos marca la diferencia, ya que no hay efecto exudativo o supurativos. Otra ventaja es que el paciente puede incorporarse a la actividad habitual inmediatamente. Como resultado, la estría no desaparece pero si mejora en más de un 50% la apariencia en estrías agudas.

¿Cómo podemos mejorar los resultados?

La búsqueda de mejores resultados ha desembocado en la unión de dos terapias combinadas con láser no ablativo, lo que permite mejorar los resultados finales. Dependiendo del tipo de estrías y el estado de la piel, también se pueden aplicar otras técnicas que complementan la acción del láser.

Técnicas coadyuvantes del láser fraccional no ablativo (ResurFX®):

La bioestimulación dérmica se realiza con silicio orgánico y factores de crecimiento autólogos.

• Silicio orgánico: es importante para la correcta formación del nuevo colágeno sintetizado. De manera estructural, garantiza la conformación de colágeno de mayor calidad aplicándose a través de microinyecciones intradérmicas.
• Plasma rico en plaquetas (PRP) ó Terapia Regenerativa con Factores de Crecimiento: El PRP es una solución concentrada de plaquetas autólogas que contienen factores de crecimiento aplicados mediante microinyecciones.
• Terapia percutánea de inducción de colágeno: esta terapia, también conocida como terapia con microagujas, implica la creación de micro-heridas extendidas por la dermis papilar, lo que provoca un aumento de la producción de colágeno y elastina. Esto provoca una mejora en la textura de la piel y un efecto tensor tras el tratamiento.

Carboxiterapia

Es la inyección de dióxido de carbono en el tejido subcutáneo. Esto origina una mayor circulación sanguínea en la zona, por lo que el tejido se oxigena mejor. Además, esta técnica favorece la producción y reorganización de colágeno y se observa un efecto físico de “desbridamiento” en las zonas en las que la adherencia es mayor. Esto mejora de manera visual el aspecto de las cicatrices atróficas y profundas, y también las estrías.