El acné: una enfermedad crónica y compleja
Escrito por:El acné es una enfermedad crónica que depende de múltiples factores y afecta de forma selectiva a las glándulas sebáceas.
Se caracteriza por un aumento de la producción de sebo, que desarrolla unas lesiones primitivas, los comedones, y lesiones inflamatorias secundarias, que son pápulas, pústulas, nódulos o quistes, pudiendo dejar cicatrices permanentes, en casos graves.
Se distinguen varios tipos de acné, con diversas intensidades.
Factores genéticos en el acné
Es una de las enfermedades más frecuentes en el ser humano, y aparece fundamentalmente entre los 12 y los 20 años.
Las manifestaciones clínicas de cada paciente en concreto, van a estar condicionadas por la influencia de factores genéticos y emocionales, y en menor medida, por factores climáticos. En las mujeres es evidente la importancia del ciclo menstrual y del embarazo.
Los efectos de la dieta en el acné sigue siendo un tema controvertido. No se ha podido establecer una norma general, de manera que deben tenerse siempre en consideración las observaciones individuales del paciente.
Medidas para acabar con el acné
El tratamiento del acné es complejo y se basa en la elección de diferentes medidas por parte de un especialista dermatólogo, de forma individualizada y personalizada para cada paciente, en función de las características de su piel y la severidad de la enfermedad.
Mientras que las formas leves pueden controlarse con medicación tópica, las moderadas y graves requerirán tratamiento oral.
Los cuidados básicos empiezan por una adecuada higiene de la piel, y los cuidados en la aplicación de cosméticos, que, para que sean idóneos en casos de acné, deben ser, siempre, libres de grasa. Es muy importante, asimismo, evitar la manipulación de las lesiones.
Es muy importante iniciar el tratamiento en fases tempranas, debido al sufrimiento psicológico que pueden causar las lesiones, principalmente faciales, a les edades en que se desarrolla.