Cómo prevenir y tratar las disfonías

Escrito por:

Dra. María Agustina Sevilla García

Otorrino

Publicado el: 07/04/2021
Editado por: Margarita Marquès


La disfonía es un trastorno caracterizado por una alteración del timbre de la voz, que puede ser debida a diversas causas orgánicas o funcionales de la laringe y de las cuerdas vocales. Tanto en niños como en adultos, la disfonía crónica requiere una visita médica para diagnosticar cualquier trastorno que se alargue más de 2 semanas, tanto para descartar la presencia de cualquier lesión grave como para impedir que la disfonía se convierta en un problema crónico y que derive en una pérdida total de la voz (afonía).

 

En las disfonías generadas por forzar la voz o por infecciones y virus, se requerirá reposo, antiinflamatorios y, dependiendo del caso, terapia con un logopeda que enseñe al paciente a utilizar bien la voz y a rehabilitarla.

 

La disfonía es una alteración del timbre de la voz,
que se puede prevenir cumpliendo con unas normas de higiene vocal

 

¿Cuáles son las causas de las disfonías?

Existen tres tipos de causas:

Funcionales: se trata de trastornos que alteran las funcionalidades de la laringe, sin que se aprecien lesiones en la exploración. Orgánicas: en estos casos, la propia laringe o algún órgano cercano tienen algún tipo de alteración. Pueden ser congénitas, como quistes o malformaciones, o adquiridas, como los tumores malignos o la laringitis. Por lesiones asociadas o mixtas: estos problemas empiezan con el mal uso vocal, aparecen con el tiempo lesiones orgánicas como nódulos vocales, pólipos o edema de Reinke.

 

Cuando la disfonía se presenta en niños, puede provenir de trastornos neurológicos, malformaciones de la laringe, papilomas laríngeos provocados por infecciones virales, o por forzar demasiado la voz. Esta última es la causa más común que provoca la disfonía en los adultos, ya que la hiperfunción vocal no tratada puede llegar a producir otras patologías como nódulos o pólipos en las cuerdas vocales.

 

Además, hay otros factores que pueden desencadenar la disfonía: reflujo gastroesofágico, el tabaquismo, procesos infecciosos como la laringitis o la tuberculosis, trastornos neurológicos de la laringe o tumores.

 

El papel del otorrinolaringólogo es clave para el diagnóstico en todos los casos.

 

¿Cuánto tiempo puede durar una disfonía?

En la gran mayoría de los casos, la disfonía se puede curar siguiendo el tratamiento adecuado, ya que muchas veces se origina por una causa infecciosa-inflamatoria. Si el problema se alarga más allá de los 10 días, es necesario que el paciente sea remitido al especialista en Otorrinolaringología para realizar un examen minucioso y una exploración exhaustiva de las cuerdas vocales y la laringe.

 

¿Cómo se puede rehabilitar la voz del paciente?

Los síntomas pueden presentarse de manera aislada o combinada. Entre los síntomas más frecuentes destacan:

Ronquera (disfonía) Voz monótona Temblor en la voz Afonía (ausencia de voz) Variaciones en la intensidad de la voz y pérdida de los agudos

 

Además, se pueden presentar otro tipo de síntomas no fonatorios como, por ejemplo, tos, picazón, carraspeo y dolor leve o moderado de garganta.

 

El otorrinolaringólogo examinará los cambios en las cuerdas vocales y los problemas del sistema nervioso. Para ello se puede utilizar una sonda con luz y una cámara (fibroscopio) para examinar la laringe. Si existiesen dudas, se puede realizar una vídeo estroboscopia, para diferenciar entre lesiones intracordales y lesiones de la mucosa de las cuerdas vocales. Las exploraciones para el estudio de la voz no son dolorosas (atraumáticas) y se llevan a cabo en consulta para lograr un estudio acústico de la voz exhaustivo. Además, es muy importante el apoyo diagnóstico y terapéutico de un foniatra/logopeda para poder rehabilitar la voz del paciente.

 

¿Se puede prevenir?

La disfonía se puede prevenir cumpliendo con unas normas de higiene vocal, entre los que se incluyen:

No carraspear Hidratarse correctamente Evitar los ambientes secos y los cambios bruscos de temperatura Evitar el humo y el tabaco Descansar correctamente Reducir el consumo de cafeína
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