¿Cómo afrontar psicológicamente el cáncer de mama?
Escrito por:A la hora de hacer un resumen sobre las distintas maneras de hacerle frente al cáncer de mama, se han identificado tres constructos usados a la hora de abordar los estilos de afrontamiento en pacientes oncológicas.
Estilos de afrontamiento del cáncer de mama
Son maneras consistentes y estables de hacerle frente al estrés, y son dos estilos principales
- Centrado en el problema: se enfoca en llevar a cabo acciones para resolver las demandas.
- Centrado en la emoción: en este caso, es necesaria la regulación de respuestas emocionales que pueden resultar un problema.
Estrategias de afrontamiento del cáncer de mama
Hay desde acciones específicas hasta otras que varían en función del contexto de la situación estresante.
Las estrategias son:
- Centradas en la aproximación: se controla el acontecimiento o evento causante de estrés haciéndole frente directamente.
- Centradas en las conductas de evitación: en este caso, se reduce la tensión por el escape de aquello que está causando el estrés.
Por lo tanto, se puede decir que estas estrategias son las distintas maneras de hacerle frente al cáncer de mama, en función de la personalidad de cada paciente.
Ajuste mental al cáncer
Otro constructo que se ha estudiado a lo largo del tiempo ha sido el de “Ajuste mental al cáncer”, y en este caso son las respuestas cognitivas y conductuales de la paciente una vez que se realiza el diagnóstico del cáncer de mama.
Este ajuste está formado por cuatro factores teóricos:
- Espíritu de lucha
- Desesperanza o desamparo
- Preocupación ansiosa
- Fatalismo
El estilo de afrontar pertenece a la personalidad de cada paciente. Por su parte, las estrategias pueden aprenderse en una consulta de Psicología para, de esa forma, conseguir un afrontamiento mejor de cara al diagnóstico.
De esta forma, se puede afirmar que una paciente con un estilo de afrontamiento se centre en el problema con una estrategia de afrontamiento se centra en la aproximación de este problema. Si lo encara de forma directa, tendrá una mejor adaptación al diagnóstico, a la enfermedad y al tratamiento en general ante una paciente que tenga estilos o estrategias distintas.