¿Por qué reducimos el colesterol LDL con estatinas?

Escrito por: Dr.Prof. Leopoldo Pérez de Isla
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Editado por: Lucía Ramírez

Las estatinas son un grupo de fármacos que se utilizan fundamentalmente para reducir los niveles del colesterol que perjudican a nuestras arterias, el denominado colesterol LDL (C-LDL). A lo largo de los años han ido apareciendo distintas estatinas.

 

Actualmente, contamos con las siguientes: lovastatina, pravastatina, simvastatina, fluvastatina, atorvastatina, rosuvastatina y pitavastatina. Estos fármacos inhiben una enzima, la hidroximetilglutaril Coenzima A reductasa, y al hacerlo bloquean un paso fundamental en nuestro organismo para la fabricación del colesterol, lo que provoca una reducción en el colesterol intrahepático que lleva a un aumento de actividad de los receptores que retiran el C-LDL de la circulación sanguínea, reduciendo así sus niveles y su capacidad de dañar las arterias. Además, la mayor parte de las estatinas son capaces de aumentar ligeramente el colesterol asociado a lipoproteínas de alta densidad (C-HDL), el llamado colesterol bueno, que “limpia” las arterias y reduce los niveles de triglicéridos (TG).

 

El tratamiento debe acompañarse de una dieta y estilo de vida saludable

 

En la actualidad, las estatinas son consideradas la base del tratamiento farmacológico para reducir los niveles de C-LDL, siempre combinadas con una dieta apropiada y un estilo de vida saludable.

 

¿Por qué es tan importante el colesterol LDL?

A día de hoy, existen cientos de estudios científicos de distintos tipos y realizados por diferentes grupos de investigadores de todo el mundo que demuestran que el C-LDL se asocia al desarrollo de aterosclerosis en nuestras arterias y que a mayor nivel de C-LDL mayor es la afectación de las misma. Asimismo, también se ha demostrado que reduciendo el C-LDL con estatinas, así como otros fármacos como el ezetimibe y los inhibidores de PCSK9, se controla la aparición de aterosclerosis en las arterias de nuestro cuerpo y, como consecuencia de ello, se reduce la posibilidad de sufrir un infarto de miocardio, un ictus, problemas en la aorta o en las arterias de las piernas.      

 

¿Por qué reducimos el colesterol LDL con estatinas y no con otros fármacos?

Existen otros tratamientos que han demostrado que reducen los niveles de C-LDL y la probabilidad de eventos cardiovasculares, como son el ezetimibe y los inhibidores de PCSK9, pero la evidencia que respalda el uso de estatinas es mucho mayor, entre otros motivos, por haberse descubierto hace más tiempo. Por ello, las principales sociedades científicas implicadas en el tema recomiendan las estatinas como primer escalón en el tratamiento para reducir las cifras de C-LDL, sin descartar su empleo combinado con ezetimibe o inhibidores de PCSK9 cuando se indica o el empleo de estos últimos sin estatinas si existe intolerancia a las estatinas.

 

Es importante matizar en este punto que hay otros fármacos y productos del tipo de los alimentos funcionales que, aunque han demostrado disminuir discretamente los niveles de C-LDL, no han sido capaces, hasta el momento, de acreditar que esa reducción se relaciona a beneficios clínicos.

 

¿Tienen las estatinas algún otro efecto además de reducir el colesterol LDL?

Aunque la evidencia científica que los respalda no es tan amplia como la que soporta sus beneficios para reducir el C-LDL, las estatinas podrían tener otros efectos beneficiosos no relacionados con el efecto hipolipemiante, entre los que destaca un efecto antinflamatorio.

 

¿Qué efectos secundarios me pueden producir las estatinas? ¿Es seguro tomarlas?

Las estatinas son un grupo de fármacos muy seguros. La probabilidad de aparición de efectos secundarios graves como la rabdomiolisis o la afectación de células hepáticas es muy poco habitual y suele aparecer en personas mayores, que toman muchos medicamentos o que padecen insuficiencia renal.

 

Sin embargo, la aparición de efectos secundarios leves es más frecuente, hasta un 10% de las personas que lo toman y están relacionados con la dosis que se administran. Los más habituales son las mialgias y la elevación en la analítica de unas enzimas hepáticas, las transaminasas. Estos efectos secundarios desaparecen sin dejar secuelas al suspender o reducir la intensidad del tratamiento.

 

¿Qué debo pensar si tengo que tomar estatinas?

Todo fármaco puede tener efectos secundarios, pero las estatinas son un grupo de medicamentos muy seguros cuando están adecuadamente indicados por el especialista en Cardiología. Actualmente, podemos decir que es una gran suerte poder contar con ellas cuando las necesitamos.

*Перевод с переводчиком Google. Мы приносим извинения за любые несовершенства

Por Dr.Prof. Leopoldo Pérez de Isla
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