¿Cómo me puedo recuperar de una fractura de hueso?

Esta reciente nevada de invierno y la posterior bajada de temperaturas, ha hecho que la nieve depositada se congele y se convierta en una superficie muy resbaladiza, la cual ha dado origen a muchas caídas accidentales en los desplazamientos que los madrileños hayan podido efectuar.

Por culpa de estos resbalones, al caer podemos sufrir —dependiendo con lo que impactemos en el suelo— desde fracturas de muñeca, codo, hombro, rodilla o bien de columna si caemos de espalda o de coxis si caemos sobre nuestra pelvis.

Algunas medidas de prevención pueden ser:

• Caminar con pasos cortos, pisando la nieve blanca, con las puntas de los pies hacia afuera, como un pingüino y el cuerpo ligeramente inclinado adelante, apoyándose en algún bastón o paraguas. Es mejor bastón con punta de metal, como los de la marcha nórdica, ya que la goma puede resbalar. El paraguas puede servir si tiene la punta de metal, si es de goma puede resbalar al realizar el apoyo.
• Mientras camina por la acera, evite tanto zonas sombrías como pisar por zonas nevadas de color gris. Tenga la precaución de revisar con la mirada las cornisas de los edificios por si existen todavía grandes cantidades de nieve por caer.
• Evite andar sobre pasos de cebra o indicadores de velocidad blancos en el pavimento, pues son muy deslizantes.
• Si presencia una caída, recomendamos no correr o hacer movimientos bruscos para ir a auxiliar a la persona accidentada ya que podríamos caernos nosotros al tratar de ayudar. Valorar el estado de consciencia de la persona accidentada, proteger al lesionado y no moverle del sitio.
   

¿Con qué tratamientos puedo recuperarme de una fractura?

El tratamiento de Fisioterapia se puede iniciar desde el periodo de inmovilización ortopédica, que suelde durar de 4 a 5 seis semanas. Esta fase se lleva a cuando, utilizando este método, se prevean buenos resultados. En pacientes que presentan mal estado general; no soportarán una intervención quirúrgica. También en niños, exceptuando fracturas articulares o periarticulares o bien si hay dificultad para utilizar anestesia.

Durante la fase de inmovilización, los objetivos que nos planteamos desde la Fisioterapia son:

• Mantenimiento de movimiento y función normal de las estructuras no lesionada.
• Disminución del dolor.
• Reabsorción del hematoma.
• Evitar la atrofia y contracturas musculares.
• Evitar la pérdida de patrones de función motora.
• Mantenimiento de la función respiratoria.
• Reconocer posibles complicaciones.

Durante la fase de movilización en Fisioterapia nos planteamos los siguientes objetivos:

• Eliminar el dolor.
• Reabsorber el hematoma y edema.
• Disminuir la atrofia muscular.
• Disminuir las contracturas musculares.
• Recuperar los programas de funciones motoras.
• Recuperar el movimiento y función de estructuras no lesionadas.
• Recuperar la función respiratoria.
• Reconocer posibles complicaciones.

¿Cómo puedo iniciar la recuperación tras una fractura?

Es competencia del fisioterapeuta guiarte durante todo el proceso:

La primera fase de la rehabilitación tiene como objetivo recuperar la amplitud de movimiento, iniciar el fortalecimiento muscular y despegar adherencias cicatriciales. Se deben realizar ejercicios de movilidad en descarga y sin resistencia, hasta alcanzar sin dolor el rango completo de movimiento. No podemos olvidar que cada persona es un mundo, y que no hay estándares o tiempos establecidos.

El comienzo de la tonificación muscular se realiza mediante ejercicios en los que se activa la musculatura sin realizar movimiento de la articulación. Por ejemplo, en casos de cadera o rodilla “poner fuerte el cuádriceps manteniendo la pierna completamente estirada”. Al principio es importante aprender estos ejercicios conocidos como ejercicios “isométricos” bajo la supervisión del fisioterapeuta, para luego poder continuar trabajando de forma autónoma en casa.

El tratamiento precoz de las cicatrices, logrará devolver a la piel su elasticidad habitual al conseguir despegarla de otros tejidos como son la fascia, músculos o tendones, facilitando así el resto del proceso. El fisioterapeuta también puede enseñar al paciente como continuar esta tarea en casa.

¿Es igual la recuperación de una fractura en un niño que un adulto?

En el niño, a diferencia del adulto, tiene gran parte de su sistema óseo sin consolidar y muchas de las fracturas se producen en la zona más cartilaginosa, produciéndose la denominada fractura en tallo verde, en la que incluso puede haber angulación del segmento óseo y requería alinearlo antes de inmovilizarlo.

En el niño dado que tiene ésta en pleno crecimiento óseo suelen tener una reparación ósea más rápida, y no suele quedar ningún tipo rastro de la fractura de en el cayo óseo

¿Pueden aparecer complicaciones en la recuperación de una fractura? ¿Cuáles son las más comunes?

Ya el tratamiento conservador puede traer consigo complicaciones por una inmovilización prologada como: Atrofia muscular, retracción ligamentosa y capsular, así como rigidez articular y problemas de retorno circulatorio... Entre las complicaciones, rara vez podemos encontrarnos con pseudoartrosis con dificultad de consolidación, necrosis avascuar, síndrome de Sudeck…

Los factores que influyen en la consolidación ósea pueden ser los siguientes:

• Tipo de hueso.
• Edad.
• Separación de los fragmentos. Si es excesiva, no permite la organización del hematoma fractuario.
• Interposición de partes blandas. En el foco de la fractura pueden interponerse diferentes tejidos, como el muscular. Esto supondrá un obstáculo mecánico.
• Alteraciones circulatorias. Para que comience la función osteogénica es necesario que exista una buena irrigación. Se puede alterar esta circulación por afectación de los vasos en el proceso traumático, inflamación e inactividad. Así, en la inflamación, se produce una hiperemia congestiva, dificultando la irrigación normal de la zona. Por su lado, la inactividad produce un enlentecimiento de la circulación al desaparecer el efecto de bombeo generado por los movimientos.
• Infección por cuerpo extraño.
• Estabilidad del foco.
   

¿Qué debo esperar una vez que se retire la escayola?

• Los dolores son habituales, y se deben a la perdida de tono muscular, aparición de adherencias, rigidez de los ligamentos y cápsula de la articulación.
• La articulación que estuvo inmovilizada tendrá reducida su amplitud normal de movimiento.
• La piel estará mucho más seca y quizá se escame con facilidad.
• Requerirá un mayor cuidado y atención. Se recomienda hidratarla frecuentemente y evitar el uso de cuchilla o cera.

Si aparece algún tipo de inflamación, no debemos alarmarnos, ya que es bastante común. La aplicación del hielo será el paso previo antes de consultar a nuestro médico. Es importante que, además de consultar con el médico, también se lo comuniquemos al fisioterapeuta, por si fuese necesario modificar el trabajo que realizamos en casa.

En una segunda fase del tratamiento, se intentará mejorar la fuerza muscular, pudiendo realizar ejercicios en carga parcial, como por ejemplo dentro de la piscina. A los ejercicios de movilidad se puede añadir resistencia de forma gradual.

Cuando ya realices movimientos con una carga completa, podrás comenzar a entrenar la “propiocepción” y el gesto deportivo, es decir, someter a la articulación a situaciones similares a las que podrás experimentar durante esas actividades. Por ejemplo; el salto, estar a la pata coja, botar una pelota, hacer cambios de dirección…

Poco a poco podremos ir introduciendo otros ejercicios que supongan más esfuerzo, o ir incorporando actividades de impacto, como puede ser la carrera en caso de fracturas en miembros inferiores. En este proceso, el fisioterapeuta nos irá indicando cómo hacer las cosas, adecuando el trabajo a las posibles molestias o sensaciones que vayan apareciendo, corrigiendo o adaptando a cada situación los ejercicios, cargas o intensidades.

¿En qué momento podré volver a mis rutinas y hacer deporte tras una fractura?

Después de un proceso de inmovilización, es muy común tener prisa por volver a una vida normal, pero precipitarse puede hacernos retroceder.

Ciertas actividades aparentemente sencillas como coger el coche, permanecer mucho tiempo de pie o caminar largas distancias precisan de un tiempo prudencial para ser retomadas de manera paulatina.

Para retomar las actividades deportivas habituales deberemos haber completado las distintas fases de recuperación mencionadas en este texto y esperar el visto bueno de nuestro médico y fisioterapeuta.