Acupuntura contemporánea: una visión integrativa de la acupuntura tradicional china, en el sistema científico occidental

En las últimas décadas, la acupuntura ha conocido un notable desarrollo en todo el mundo. La situación de la acupuntura y su aceptación como método terapéutico presenta, a veces, una contradicción. Por un lado, su aplicación se acepta como un acto médico, incluso como una especialidad médica, pero no se comprende bien cómo funciona, cuál es su utilidad y cuáles son sus mecanismos de acción. De esta manera, su aplicación se limita, en casi todos los casos, a la actividad privada.

Sin embargo, cuando observamos sus efectos y se valoran sus fundamentos biológicos, se empiezan a disipar dudas e incluso nos convierte a algunos en grandes entusiastas de la acupuntura.

Los primeros movimientos de investigación en occidente se referían al efecto de la acupuntura en el dolor. Así, ya en la década de 1970 se demostró, por medio de sección o bloqueo anestésico de un nervio estimulado, que la integridad estructural y funcional del sistema nervioso periférico es una condición imprescindible para que se obtengan los efectos esperados. La naturaleza neural de las propiedades terapéuticas de la acupuntura estaba ya establecida.

Los estudios posteriores nos llevaron a que se redefiniera la acupuntura como un método de estimulación neural periférica. Al fin y al cabo, se trata de un sistema terapéutico basado en la utilización de distintos mecanismos y métodos dirigidos a producir una neuromodulación. Especialmente dirigido al tratamiento del dolor y de los síndromes disfuncionales.

Los trastornos funcionales

El progreso de la sociedad ha traído muchos beneficios, como el crecimiento significativo de la expectativa de vida. Como consecuencia, en la actualidad hay un número mucho mayor de personas de edad avanzada, personas con traumatismos importantes y enfermedades degenerativas que se han desarrollado en toda su expresión.

Todas estas personas son más proclives a padecer dolor crónico y enfermedades funcionales, trastornos en los que, precisamente, la acupuntura ha demostrado su mayor eficacia.

Podemos añadir también el efecto sobre los problemas emocionales. En la actualidad, las personas están expuestas a altos niveles de estrés crónico, que llevan a un incremento de trastornos relacionados y que, finalmente, comprometen su calidad de vida.

El término trastornos funcionales es usado para describir quejas subjetivas para las cuales los tratamientos convencionales en general no dan buen resultado. Estos trastornos, acompañados o no de dolor, son parte del día a día de la mayoría de la población. Provocan un grado de sufrimiento de distintos niveles de afectación y son, frecuentemente, la base para el desarrollo de procesos patológicos, que pueden producir cambios funcionales y estructurales.

La acupuntura médica contemporánea

La acupuntura médica contemporánea es una evolución de la acupuntura tradicional, método de tratamiento cuyos orígenes se remiten a la China de más de 2000 años. En su desarrollo actual, se define como un conjunto de técnicas que tienen consecuencias neurofisiológicas relacionadas con un incremento del input neural y la promoción de influencias moduladoras.

Es un método de tratamiento médico que se destina a promover la salud y disminuir el impacto de sufrimiento causado por las enfermedades. Actúa por medio de procedimientos neuromoduladores aplicados en localizaciones específicas de la anatomía y que, relacionados con la red del sistema nervioso periférico, desencadenan respuestas como analgesia o la normalización de trastornos funcionales.

El método está recomendado en el tratamiento de síndromes como respuesta a:

• Estrés.
• Síndrome de fibromialgia.
• Migraña.
• Trastornos del sueño.
• Trastornos digestivos.
• Trastornos urogenitales.
• Trastornos respiratorios.
• Trastornos circulatorios.
• Trastornos inmunitarios.
• Trastornos psico-neuro-endocrinos.
• Dolor crónico (Sudeck, Neuralgia del trigémino, ciática, etc.).

Los recursos terapéuticos de la acupuntura médica contemporánea

Para conseguir un efecto neuromodulador se utilizan diferentes técnicas. Las más importantes son la punción con aguja, la electro-neuro-estimulación. Por medio de esas técnicas se puede promover, además de analgesia, una amplia normalización funcional.

• Agujas

El efecto terapéutico por medio de la inserción de agujas, que se produce a través de la estimulación de los mecano-receptores del tejido conectivo y de los nervios periféricos, está perfectamente demostrado científicamente.

Es una técnica muy simple en su esencia, pero exigente en su manipulación. La aguja debe insertarse y alcanzar las estructuras neurales sin provocar dolor o produciendo una leve sensación de parestesia.

• Electro-neuro-estimulación

Es utilizada desde 1970 para tratar síndromes dolorosos severos. El término comprende diferentes modalidades: electro-neuro-estimulación transcutánea, percutánea, subcutánea, estimulación neural periférica, estimulación de la médula espinal, estimulación cerebral profunda y estimulación cortical.

En la periferia, se produce una hiperpolarización de las fibras, cuando son sometidas a una corriente eléctrica.

En el nivel encefálico, los efectos de la electro-neuro-estimulación incluyen analgesia del tipo opioide, pero también genera respuestas homeostáticas por medio de activación y desactivación de estructuras límbicas.