Implantes oído medio, una solución discreta y cómoda

Los implantes de oído medio son dispositivos auditivos que se colocan en el oído medio y que tienen como objetivo mejorar la audición de las personas con pérdida auditiva neurosensorial, conductiva o mixta. A diferencia de los audífonos convencionales, los implantes de oído medio no amplifican el sonido, sino que lo transforman en vibraciones mecánicas que estimulan directamente la cadena de huesecillos transmitiéndose hacia las estructuras del oído interno.
 

Los implantes de oído medio constan de dos partes: una externa y una interna.

• La parte externa es el procesador de sonido, que se sitúa sobre la cabeza (por detrás y por encima de la oreja), y contiene la batería, el micrófono y el procesador digital de señales. El procesador de sonido capta los sonidos del ambiente y los transforma en una señal digital que se transmite a través de la piel hasta la parte interna.
• La parte interna es el implante propiamente dicho, que se coloca debajo de la piel mediante una incisión detrás de la oreja. Recibe la señal del procesador externo y mediante un transductor denominado transductor de masa flotante (FMT), acoplado a diferentes partes de la cadena de huesecillos (habitualmente yunque o estribo) o del oído medio (ventana redonda del caracol) según las necesidades auditivas de cada paciente, transforma la señal digital en vibraciones mecánicas que estimulan directamente el oído interno.

Ventajas de los implantes de oído medio

Los implantes de oído medio tienen varias ventajas sobre los audífonos convencionales:

1. Al no amplificar el sonido, evitan los problemas de retroalimentación acústica, las distorsiones y el ruido ambiental, mejorando la calidad del sonido percibido.
2. Al dejar el conducto auditivo externo completamente abierto, permiten una mejor ventilación del oído y evitan las infecciones y las irritaciones.
3. Al estar integrados en el organismo, ofrecen una mayor discreción y comodidad para el usuario.

¿A qué personas se recomienda la cirugía de implantes de oído medio?

Los implantes de oído medio son una opción terapéutica para aquellas personas que no obtienen buenos resultados con los audífonos convencionales o que no pueden usarlos por diferentes motivos, como alergias, malformaciones, infecciones crónicas del oído o fracaso de cirugías previas sobre la cadena de huesecillos (timpanoplastia). Es importante destacar que no existe un límite de edad para la colocación de los mismos y que la indicación viene determinada por el estado general del paciente.
 

Proporcionan una buena ganancia en las frecuencias agudas, fundamentales para la discriminación de la palabra, por lo que son una buena alternativa en aquellos pacientes con pérdida auditiva en estas frecuencias.

Cirugía de implantes de oído medio

Los implantes de oído medio requieren una evaluación previa por parte de un especialista en Otorrinolaringología e implantes auditivos, que determinará si el paciente cumple los requisitos médicos y audiológicos para su implantación. Los criterios pueden variar según el tipo y modelo de implante, pero en general se exige tener una pérdida auditiva moderada a severa, tener un buen estado general de salud y tener una motivación y expectativas realistas sobre el tratamiento.
 

La cirugía para implantar el dispositivo se realiza bajo anestesia general y dura entre una y dos horas. El postoperatorio suele ser sencillo y no requiere hospitalización prolongada. El paciente debe seguir unas pautas de cuidado e higiene de la incisión quirúrgica y evitar actividades que puedan dañarlo o desplazarlo, como deportes de contacto, golpes en la cabeza o exposición a campos magnéticos. El procesador de sonido se activa entre 4-6 semanas después de la cirugía, cuando la herida ha cicatrizado y se ha comprobado el correcto funcionamiento del implante. A partir de entonces, se realiza un seguimiento periódico para ajustar los parámetros del dispositivo y evaluar los resultados auditivos.