Laparoscopia en Urología, alternativa menos invasiva
Escrito por:La laparoscopia urológica es una técnica muy empleada en Urología. Se utiliza tanto para patologías malignas (Uro-Oncología) como para patologías benignas y reconstructivas.
La cirugía laparoscópica y robótica consiste en crear un espacio en el interior de la cavidad abdominal con CO2. Este se introduce mediante unas cánulas que se colocan en el interior del abdomen del paciente para insuflar el gas que cree el espacio por donde el especialista en Urología introducirá los instrumentos necesarios para la intervención (tijeras, pinzas y brazos robóticos), además de una óptica (2 o 3 dimensiones). Así, con una ampliación de la imagen, se podrá realizar el procedimiento quirúrgico de la misma manera que con la cirugía abierta pero con menor incisión abdominal.
Patologías tratables con laparoscopia urológica
En Uro-Oncología pueden tratarse quirúrgicamente diversas patologías. Con esta técnica se consiguen mejoras respecto a la cirugía abierta, tales como una notable disminución del sangrado, disminución de la tasa de trasfusión, menos agresión de la pared abdominal porque las incisiones son más pequeñas, menos uso de analgésicos y una recuperación más rápida, con la misma eficacia oncológica y reparadora.
Se recomienda la cirugía laparoscópica en las siguientes patologías:
- Cáncer renal (con nefrectomía total o parcial)
- Cáncer urotelial (con nefroureterectomía, cistetectomía radical y derivaciones urinarias)
- Cáncer de próstata (prostatectomía radical)
En patologías benignas se emplea en:
- Casos de obstrucción infravesical por hiperplasia benigna de próstata en glándulas de gran volumen (adenomectomía laparoscópica)
- Cirugía reconstructiva ureteral (pieloplastia) en litiasis
- Cirugía uroginecológica (colposacropexias laparoscópicas)