Hernia discal lumbar y ciática
Escrito por:La enfermedad degenerativa de las vértebras lumbares comienza a nivel de los discos intervertebrales. Son fenómenos degenerativos del disco que hacen su aparición a partir de los 30 a 40 años de edad con la deshidratación del núcleo gelatinoso discal. Es una lesión relacionada con diversas circunstancias y factores personales como son: la herencia, la longitud de la columna vertebral, el estado de la musculatura, el sobrepeso, sobrecargas, malas posiciones o esfuerzos indebidos.
Cuando el disco degenera y se deshidrata se pueden producir fisuras o fragmentación en su interior. Asimismo su altura disminuye –lo que denominamos pinzamiento- y se instaura una disfunción con una movilidad vertebral anormal. A medida que el núcleo discal va degenerando se transfiere mayor tensión al anillo que rodea al disco y esto puede producir una rotura del mismo. Si llega a producirse una rotura del anillo, el núcleo discal se puede desplazar, es a esto a lo que denominamos hernia discal lumbar.
Degeneración discal sin hernia
En cambio, si no hay hernia, la degeneración discal no tiene porqué ser responsable de cuadros dolorosos. Con el paso de los años prácticamente todos los individuos tienen alteraciones discales, pero eso no constituye necesariamente una enfermedad. No obstante, un disco degenerado puede conllevar un incremento de la amplitud de sus movimientos, y esto sí provoca una sobrecarga de las articulaciones intervertebrales posteriores, lo que a su vez puede causar una inestabilidad vertebral. Igualmente, estas articulaciones pueden hipertrofiarse al formarse hueso anormal a su alrededor, causando así un estrechamiento de los canales por los que pasan los nervios o estenosis.
La ciática
La ciática es un cuadro de dolor lumbar que irradia a las extremidades inferiores siguiendo el trayecto de los nervios ciáticos. El dolor comienza en la región lumbar y suele recorrer la nalga, la cara posterior del muslo y la cara posterior y externa de la pierna y el pie. La ciática puede ser debida a una estenosis vertebral o a una hernia discal, que llega a contactar con los nervios. En todo caso, los nervios ciáticos comprimidos determinan un dolor en las extremidades inferiores, en el territorio inervado por los mismos.