¿Dolor de espalda durante el teletrabajo?
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¿Con el auge del teletrabajo, ¿cómo podemos prevenir el dolor de espalda?
Desde el punto de vista ergonómico, hay que diseñar la zona de trabajo, igual que si el trabajo se realizara en la empresa. Una buena silla, con apoyo lumbar y reposabrazos, nos ayudará a evitar el dolor de espalda.
Elegir bien la altura de la silla respecto a la mesa, en la que los reposabrazos puedan quedar por debajo de ella. Con la proliferación de los ordenadores portátiles, a veces este queda demasiado bajo respecto a nuestros ojos, superando el ángulo de 10º desde la altura de nuestros ojos hasta la parte superior de la pantalla de la computadora.
Evitar también los reflejos en la pantalla, así como tener luz suficiente y hacer unos minutos de descanso cada hora, en los que estiraremos las piernas y descansaremos la vista, mirando al horizonte.
No debemos trabajar más horas porqué estemos en casa. Siempre debemos trabajar con el menor estrés posible, ya que también tiene relación con nuestro tono muscular.
¿En qué nos debemos fijar a la hora de sentarnos?
No debemos sentarnos en cualquier silla. Recordemos el apoyo lumbar, los codos deben quedar a 90º en la relación silla-mesa, tal y como he indicado anteriormente.
En caso de dolor de espalda, ¿cómo podemos aliviar los síntomas?
Aparte de los descansos indicados, si padecemos dolor de espalda, deberíamos realizar estiramientos suaves, tanto de las extremidades superiores (que tendrán relación con la zona cérvicodorsal), como de las extremidades inferiores (que tendrán relación con la zona lumbosacra). También sería conveniente realizar respiraciones profundas, para mejorar la relajación y la función del diafragma respiratorio. Lógicamente, si el dolor no cede, debemos pedir cita a nuestro fisioterapeuta u osteópata.
¿En qué momento debemos acudir al especialista?
Debemos acudir al médico especialista si el dolor va acompañado de algún síntoma de alarma, como mareos, vértigos, cefaleas, sangrados, trastornos digestivos, que nos hagan pensar en cualquier otra causa del dolor que no sea del sistema músculo-esquelético.
¿Cuándo se puede cronificar el dolor?
El dolor se puede cronificar con la edad, si no realizamos ejercicio físico , reducimos el estrés o si el desgaste articular es excesivo.
