5 puntos clave para tratar la sensibilidad dental

La sensibilidad dental es un problema frecuente entre la sociedad, que provoca escalofríos y dolor. Esto sucede cuando se toman alimentos muy fríos, demasiado calientes o se muerde algo que está más duro de la cuenta. La sensación es desagradable y molesta, traduciéndose en una punzada que recorre los dientes y cala en las encías.

Qué causa la sensibilidad dental

La exposición de la dentina, la parte más interna de los dientes, a los agentes externos es el causante de esta sensación. Su exposición se debe al desgaste diario, la falta de higiene, el consumo de bebidas carbonatadas o los hábitos perjudiciales como tabaco o bruxismo.

La sensibilidad dental no es una patología clínica, pero la sensación desagradable que causa al paciente es muy desagradable y los lleva a consultar al dentista para saber cómo aliviarla. La clave, como en muchas otras dolencias bucodentales, es el rigor en la higiene dental.

5 claves para evitar y tratar la sensibilidad dental

• Hay que cuidar la higiene dental, cepillando los dientes tres veces al día por todas sus caras y cada vez que se tomen alimentos azucarados, pegajosos o bebidas carbonatadas.
• Es importante elegir correctamente el cepillo dental, ya que hay pacientes con sensibilidad dental a los que el mero roce del cepillo de dientes les producen escalofríos. Si esto sucede, hay que comprar uno con filamentos muy suaves de puntas redondeadas y cepillar la boca sin ejercer presión.
• Comprar la pasta de dientes más adecuada de las que hay en el mercado, muchas de ellas son especiales para dientes sensibles. Los componentes de estas pastas dentales permiten reforzar la dentina, consiguiendo que quede menos expuesta y que los agentes externos le afecten menos.
• No hay que olvidar la seda y el enjuague, ya que deben formar parte de una buena rutina de higiene dental, pero se hacen imprescindibles en aquellos pacientes con sensibilidad dental. La seda permite eliminar los restos que quedan en los espacios interdentales y el colutorio arrastra todo lo que queda en la boca.
• Hay que cuidar la alimentación, evitando los alimentos muy ácidos que dañan la dentina. También hay que evitar tomar cosas demasiado frías o demasiado calientes, ya que los cambios bruscos de temperatura afectan muchísimo a las piezas.
• Hay que evitar los hábitos nocivos como el fumar, morderse las uñas y mordisquear palillos o bolígrafos. A pesar que cueste es importante decir adiós a estos hábitos, ya que dañan la superficie de los dientes.