Llegada de la primavera: aumentan los diagnósticos de alergia al polen
Escrito por:Con la llegada de la primavera muchas personas comienzan a desarrollar síntomas como congestión nasal, rinoconjuntivitis, estornudos, picor en los ojos y en la nariz e, incluso, asma. Por lo general, se debe a reacciones alérgicas a diversos agentes como el polen, ácaros y epitelios.
son muy comunes con la llegada de la primavera
Polen de los árboles y gramíneas, las alergias primaverales más frecuentes
En los meses de marzo y abril nos referimos principalmente a la alergia al polen. Sin embargo, existen diferentes tipos de pólenes que pueden causar esta reacción. En los últimos tres años la alergia al polen de árboles se ha adelantado con respecto a años anteriores, y los diagnósticos han aumentado, fundamentalmente debido a la sequía y a la falta de precipitaciones.
Por otro lado, existe otro tipo de polen, que es el de las gramíneas. Este suele manifestarse un tiempo después del polen de los árboles, pero despierta alergias con síntomas más intensos, debido a que es un polen que vuela y se mueve mucho. Si bien depende mucho de la climatología, el polen de gramíneas afecta a toda la península ibérica pero comienza por el centro y el sur de España.
Síntomas y tratamientos de las alergias en primavera
Las alergias que aparecen en esta época del año habitualmente manifiestan rinoconjuntivitis, picor de ojos y de nariz y estornudos. En algunos casos puede ser más grave y generar crisis de asma.
En cuanto a los tratamientos, lo más usual es recomendar antihistamínicos que se pueden administrar de forma local a nivel de los ojos o en la nariz y también en forma de comprimidos. Si existen asociadas crisis de asma también se deberá indicar el uso de inhaladores, que pueden ser de rescate, cuando las crisis son puntuales, o preventivo, si el asma se mantiene.
La importancia de la prevención antes de la primavera
Uno de los errores más comunes es acudir a consulta con un especialista en Alergología cuando ya ha comenzado la primavera y empezamos a manifestar los síntomas. Sin embargo, la recomendación es iniciar un tratamiento preventivo con vacunas una vez pasada la primavera, idealmente en septiembre, para poder tratar la alergia y no solamente los síntomas. De hecho , en los casos más graves, en los que la alergia va a más cada año, la indicación recomendada es la vacunación, que se deberá aplicar antes de la primavera.
¿Cuáles son las alergias más comunes en la actualidad?
Las alergias que más se han incrementado en los últimos años son las alergias a medicamentos, que constituyen alrededor de un 40% del total de los diagnósticos.
Las alergias inhalantes, como la alergia al polen, a los ácaros y a los epitelios, son también muy habituales. Y a continuación se presentan las alergias alimentarias, que también están aumentando en el último tiempo.
No debemos olvidar que también se atienden en nuestras consultas pacientes con patologías cutáneas, como la urticaria o la dermatitis alérgica de contacto entre otras.
¿Todas las personas pueden presentar alergias a lo largo de su vida?
En el desarrollo de una alergia existe un fuerte componente genético, por lo que las personas que tienen padres o abuelos alérgicos tienen un riesgo mayor. Sin embargo, otro tipo de alergias, como la alergia a fármacos o las alergias de contacto, se pueden presentan en cualquier persona.
Por lo general, quien más expuesto está, más riesgos tiene. Por esto, hoy en día existen muchos adultos mayores que presentan alergias a ciertos medicamentos, principalmente pacientes mujeres. Por su parte, las alergias inhalantes se manifiestan con mayor frecuencia en niños y adolescentes.
Los expertos hemos observado un aumento generalizado en los diagnósticos de alergias en las últimas décadas, por lo que sospechamos que también puede influir el estilo de vida del primer mundo de nuestra sociedad.
La mayoría de las enfermedades alérgicas suelen venir para quedarse, por lo que es muy importante la prevención y el tratamiento temprano para evitar cuadros y síntomas más graves. Además, es necesario instruir al paciente sobre los riesgos que tiene, para que administre su medicación de manera adecuada y acuda a urgencias si fuera necesario.
