Pronóstico del pie equinovaro
El pie equinovaro se puede tratar y es recomendable hacerlo; si no se trata, puede llegar a ser doloroso a medida que el niño crece y puede afectar su habilidad para poder caminar. Esto puede causar que el niño ande de manera incómoda ya que tendrá que acostumbrarse a caminar con la planta del pie o fuera del pie, y estos ajustes pueden causar otras consecuencias negativas, como ampollas, callos y el deterioro del crecimiento de los músculos de la pantorrilla. También hace que el niño sea más propenso a desarrollar artritis.
Incluso si se trata, el niño puede aún sufrir consecuencias: su movilidad puede verse ligeramente limitada, los músculos de la pantorrilla en el lado afectado por el pie equinovaro puede que sean más pequeños que los del otro lado y el pie afectado puede ser una talla de zapato más pequeña.
Síntomas del pie equinovaro
El síntoma principal es la apariencia y de esta forma es como un médico percibirá y diagnosticará la afección. Los pies afectados por el pie equinovano son por lo general más cortos que en otros pies, y pueden torcerse de tal manera que pueden llegar a parecer estar al revés.
Otro posible síntoma es que las extremidades de los músculos de la pantorrilla afectada esten poco desarrolladas.
A pesar de todo esto, el pie equinovaro no parece causar dolor a los bebés; sin embargo, se recomienda realizar un tratamiento ya que puede que sea doloroso una vez que el niño empiece a aprender a caminar.
Exámenes médicos para diagnosticar el pie equinovaro
Si bien el pie equinovaro se puede ver claramente cuando nace el bebé, se puede diagnosticar antes del nacimiento del bebé si es visible en una ecografía. Aunque no se puede tratar hasta que nazca el bebé, saber qué esperar puede ayudar a los padres a planear el tratamiento.
¿Cuáles son las causas del pie equinovaro?
No se conocen del todo las causas del pie equinovaro, pero se cree que puede haber un componente genético, ya que parece ser hereditario.
Tratamientos para el pie equinovaro
El tratamiento para el pie equinovaro es sobre todo físico. El método estándar es el método Ponseti. Este método consiste en mover suavemente el pie a una posición más natural, y colocar una escayola durante una semana y repetir el procedimiento a la semana siguiente. El método dura normalmente entre 5 y 8 semanas.
La mayoría de los bebés necesitan una operación menor para aflojar el tendón de Aquiles una vez que se ha retirado la última escayola. La operación se realiza bajo anestesia local.
Para prevenir que el pie equinovaro vuelva a aparecer, el bebé deberá usar unas botas especiales con una barra para mantenerlos en su adecuada posición durante los primeros 3 meses, y más tarde deberán ponerselos solo por la noche hasta que cumplan los cuatro o cinco años.
¿Qué tipo de especialista trata el pie equinovaro?
Los pediatras se especializan en diagnosticar y tratar enfermedades en bebés y niños. Los cirujanos ortopédicos pediátricos en particular, se especializan en afecciones musculoesqueléticas, como el pie equinovaro.