Parálisis facial
ÍNDICE:
- ¿Qué es la parálisis facial?
- Pronóstico de la enfermedad
- Síntomas
- ¿Cómo se diagnostica?
- Causas
- ¿Se puede prevenir?
- ¿En qué consiste el tratamiento?
- ¿Qué experto lo trata?
¿Qué es la parálisis facial?
La parálisis facial es una patología que consiste en la pérdida parcial o total del movimiento muscular voluntaria en uno o ambos lados de la cara.
Pronóstico de la enfermedad
Esta alteración tiene un buen pronóstico, ya que en un alto porcentaje de los casos se consigue una total recuperación de la función del nervio. El tiempo de recuperación puede variar de 4 semanas a 6 meses.
Aun así, pueden quedar secuelas. La más frecuente es un leve grado de parálisis de los músculos afectados.
Síntomas de la parálisis facial
Existen una gran cantidad de síntomas que están asociados a una parálisis facial.
Antes de la parálisis pueden presentarse síntomas de catarro banal, así como dolor intenso en la región retroauricular.
Cuando se establece la parálisis, estos síntomas pueden empeorar durante 24-48 horas y pueden acompañarse de los siguientes:
- Falta de movilidad en un lado de la cara
- Asimetría en reposo y al gesticular
- Imposibilidad para sonreír
- Dificultad para cerrar los párpados
- Alteraciones en el lagrimeo
- Alteraciones en el sentido del gusto
- Dificultad para subir la ceja
- Frente lisa
- Alteraciones en la respiración nasal
- Mordida de la mucosa bucal
- Caída de la saliva
Pruebas médicas para la parálisis facial
Para diagnosticar la parálisis facial, el médico especialista realiza una exploración.
En algunas ocasiones, se debe complementar con otras pruebas con el objetivo de valorar el grado de afectación. Estas pruebas son:
- Pruebas de salivación
- Pruebas auditivas
- Pruebas para evaluar la afectación del nervio
- Test de Schirmer
- Estudio radiológico de imagen del cerebro
- Resonancia magnética
- TAC
¿Cuáles son las causas de la parálisis facial?
Esta patología puede deberse a diversas afecciones o factores:
- Inflamación del nervio a causa de un virus de la familia herpes simple
- Inflamación del nervio por el virus varicela zóster
- Lesiones por tumores
- Traumatismos craneales
- Agentes tóxicos
- Enfermedades autoinmunes
- Infecciones agudas y crónicas del oído
- Trastornos congénitos (Síndrome de Moebius)
- Causas desconocidas
¿Se puede prevenir?
Las personas que padecen diabetes, obesidad y presión arterial alta tienen más probabilidades de sufrir una parálisis facial.
En este sentido, una forma de prevenir esta alteración consiste en evitar estos factores de riesgo con unos hábitos de vida saludables.
Tratamientos para la parálisis facial
Normalmente, se administran corticoides para frenar el progresivo deterioro del nervio y masajes de los músculos faciales. En los casos más graves, también se practican tratamientos quirúrgicos específicos mediante técnicas tanto estáticas como dinámicas, para recuperar el movimiento y funcionalidad de los músculos.
El tratamiento de la parálisis facial periférica debe iniciarse de forma inmediata tras su aparición para lograr que la recuperación sea más rápida y efectiva, así como evitar que las secuelas de la parálisis facial.
En algunas ocasiones, la recuperación de la parálisis facial es incompleta porque el nervio está dañado y no es capaz de funcionar con normalidad. Puede aparecer complicaciones como el espasmo hemifacial (cuando algunos músculos están contraídos de forma permanente) o sincinesias (cuando, al realizar un movimiento voluntario, aparece otro no deseado).
Por suerte, ambas complicaciones pueden mejorar con el tratamiento rehabilitador adecuado: ejercicios de reeducación neuromuscular facial o, en algunas ocasiones, infiltraciones con toxina botulínica.
¿Qué especialista lo trata?
El experto encargado del tratamiento de la parálisis facial es el experto en Otorrinolaringología.