El asma: una enfermedad crónica

Escrito por:

Dr. Joaquim Bosch Castells

Pediatra

Publicado el: 30/12/2020
Editado por: Margarita Marquès


El asma es una enfermedad crónica, es decir, que puede estar presente en varios momentos de la vida del enfermo. Se caracteriza por una inflamación y estrechamiento de las vías respiratorias (bronquios) de los pacientes y, normalmente, es reversible ya sea por el uso de medicación o espontáneamente.

 

Asma extrínseco y asma intrínseco

Se clasifica en asma extrínseco e intrínseco, en función de cual sea el desencadenante de este estrechamiento e inflamación.

 

El extrínseco se caracteriza por estar asociado a la alergia. En este caso, partículas que se encuentran en el aire, como pueden ser heces de los ácaros, pólenes, esporas de hongos, epitelio de animales u otros, son las que originan la irritación a los bronquios que desencadenará a los cambios antes mencionados (inflamación y estrechamiento) de estos.

 

El intrínseco es aquel que se produce (mismos cambios) por causas diferentes (ejercicio físico, contaminación, emociones u otras) a la alergia.

 

El asma es una enfermedad crónica, que puede estar
presente en varios momentos de la vida del enfermo

 

Estos episodios de estrechamiento e inflamación les llamamos crisis y pueden aparecer en diferentes momentos de nuestra vida. Puede ser que en la infancia y adolescencia sea bastante frecuentes, disminuyan de frecuencia en edad adulta y vuelvan aumentar de frecuencia en la vejez.

 

Cómo se diagnostica el asma

El diagnóstico de asma no es fácil porque hay síntomas (tos, ahogo, pitidos) que se dan en esta enfermedad que también se dan en otras y por esto, normalmente, a parte de la clínica son necesario el uso de pruebas de función respiratoria.

 

Tipos de tratamiento y prevención

Realizamos 2 tipos de tratamiento: uno que va dirigido a tratar las crisis y otro que va dirigido a la prevención de éstas. En el primer caso, normalmente, usamos broncodilatadores inhalados de acción corta y corticoides vía oral y, en el segundo caso usamos, entre otros, normalmente broncodilatadores de acción larga inhalados y corticoides inhalados.

 

Una de las preguntas que nos podemos hacer es si el asma se pude prevenir y la respuesta es que podemos intentar hacerlo. Lo haríamos evitando los desencadenantes si estos son conocidos (evitar pólenes, ácaros, uso broncodilatadores antes ejercicio físico) y con la medicación de prevención de crisis.

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