¿Cómo le afecta el frío a tu piel?

Escrito por:

Dr. Gregorio Álvarez Fernández

Dermatólogo

Publicado el: 26/02/2018
Editado por: Anna Raventós Rodríguez


El frío intenso y las temperaturas invernales tienen afectación directa sobre la piel, porque con la bajada de las temperaturas, aparecen algunos signos en la piel como tirantez, sequedad o rojeces. 

 

Por este motivo, es muy importante mantener ciertos hábitos saludables todo el año para mantener el buen cuidado de la piel y soportar mejor estas temperaturas.

 

Cómo cuidar la piel durante el año

Estos hábitos que hay que seguir de forma anual son:

Beber entre 1,5 y 2 litros al día de para mantener una buena hidratación cutánea. Evitar el tabaco y alcohol, así como practicar ejercicio de forma regular. Seguir una dieta sana y variada, rica en frutas y verduras, con la finalidad de tener un nivel adecuado de antioxidantes y vitaminas. Ducharse en poco tiempo y con agua templada, con jabones suaves con base de glicerina y pH ligeramente ácido o neutro. En invierno la radiación ultravioleta solar es menos potente, pero no debemos descuidarla, sobre todo si hacemos deportes de nieve: usar cremas faciales y sticks labiales siempre con fotoprotección solar 50+.

 

El frío intenso y las temperaturas invernales
tienen afectación directa sobre la piel

 

Cómo cuidar la piel en invierno

En invierno, nos vemos sometidos al frío intenso, temperaturas extremas (en la calle frío y en el trabajo o en casa demasiado calor) o viento. Hay áreas de nuestra piel especialmente expuestas a estas “agresiones”, cómo las manos y los labios.

 

Debido a ello, es importante que en invierno adoptemos algunos hábitos que van a mejorar la salud de nuestra piel:

La calefacción de los hogares, oficinas o locales suele estar a temperaturas excesivamente altas, algo que reseca mucho el ambiente y la piel. Una buena solución es el uso de humidificadores. Evitar cambios bruscos de temperatura, sobre todo en personas que padezcan rosácea y cuperosis. Es importante usar cremas hidratantes para la cara, con antioxidantes (vitamina C y E) y ácido hialurónico, ya que aumentan la hidratación. Hay que aplicar crema hidratante en las manos varias veces al día. Es importante optar por una crema concentrada a base de glicerina. • Hay que proteger bien las manos para que no sufran de frío extremo. Usa sticks hidratantes labiales de forma repetida: hidratan la mucosa labial y la “impermeabilizan” frente al frío externo. Hay que evitar humedecer los labios con la lengua, ya que la saliva contiene amilasa y es altamente irritativa, por lo que agravamos la irritación y la sequedad.
Pide cita con un especialista