¿Qué son las infiltraciones locales?
Las infiltraciones son unas inyecciones de una solución en los tejidos. Estas se utilizan como tratamiento mínimamente invasivo y local que se pueden aplicar en distintas localizaciones, en función de la zona afectada. Se puede hacer a nivel intraarticular, paraarticular, intramuscular o en las inserciones tendinosas.
¿En qué consisten las infiltraciones locales?
La infiltración se realiza mediante una aguja esterilizada y con el producto que se requiere más pertinente. Estas sustancias pueden ser:
- Corticoides: ayudan a aliviar el dolor y la inflamación.
- Ácido Hialurónico: ayuda a la regeneración de las articulaciones.
- Plasma Rico en Plaquetas (PRP): mejora la vascularización y ayuda a la regeneración de los tejidos.
- Concentrado rico en Células Madre: contribuye a la regeneración de las células.
Por lo general no se realizan más de 3 infiltraciones al año y se suele dejar un mes entre cada sesión.
¿Por qué se utilizan las infiltraciones locales?
El objetivo de este tratamiento es aportar una solución antiinflamatoria en una zona concreta, aliviar los dolores y fomentar la regeneración de los tejidos y articulaciones dañadas. Por ejemplo, se suele utilizar cuando se padece patologías como la tendinitis, traumatismos, artritis o esguince muscular, entre otros.
Se trata de un tratamiento mínimamente invasivo con una incidencia muy local.
Contraindicaciones de las infiltraciones locales
Es importante realizar un diagnóstico médico previo para saber el estado de la zona a tratar. Además, es importante conocer qué sustancia es la más indicada para la patología que padece el paciente.
El médico debe revisar el estado general del paciente y sobre todo conocer sus alergias, ya que se puede ser alérgico a las sustancias que se van a infiltrar.