Estimulación cognitiva
¿Qué es la estimulación cognitiva?
La estimulación cognitiva es un conjunto de actividades dirigidas a mantener o a perfeccionar el funcionamiento cognitivo en general, a través de ejercicios de memoria, percepción, atención, concentración, lenguaje, funciones ejecutivas como: solución de problemas, planificación, razonamiento y control. Praxias y funciones viso espaciales, mediante programas estructurados de estimulación.
Es decir, este tratamiento se basa en estimular y mantener las capacidades cognitivas existentes, con el objetivo de mejorar o mantener el funcionamiento cognitivo y retrasar el deterioro que se produce continuamente. Conforme el ser humano aumenta de edad el organismo sufre cambios por dentro y por fuera, las capacidades cognitivas van menguando con el paso del tiempo de forma diferente en cada individuo de manera más o menos rápida.
Los cambios a nivel cognitivo pueden tener diferentes causas:
- El paso de los años.
- Problemas de memoria relacionados a la edad.
- Deterioro progresivo que puede acabar en demencia.
- Deterioro cognitivo leve.
- Una enfermedad neurodegenerativa.
- Demencia tipo Alzheimer, vascular o cuerpos de Lewy.
¿Por qué se realiza?
La estimulación cognitiva se realiza para conseguir la activación de funciones cerebrales mediante actividades y ejercicios. En muchas ocasiones se utilizan ejercicios como las sopas de letras, la búsqueda de diferencias o los sudokus, entre otros pasatiempos como los juegos de mesa. La estimulación cognitiva se basa en realizar actividades para estimular el cerebro, además las actividades del día a día, se pueden complementar con los ejercicios de papel y lápiz citados anteriormente. Realizar varios tipos de actividades pueden potenciar la estimulación cognitiva de cada individuo.
Preparación para la estimulación cognitiva
Lo más importante es adaptar el entorno a la persona con demencia y no al revés, se debe facilitar y simplificar el ejercicio con el fin de que lo pueda desarrollar con éxito. Este precepto será necesario durante toda la enfermedad, para actividades a realizar o para cumplir con éxito las actividades del día a día. Por ejemplo: realizar un ejercicio en que la persona con la que estamos realizando la terapia nos cuente cómo preparar una receta o que nos escriba los pasos a seguir. Preguntar por algún acto familiar que recuerda con felicidad o repasar y ordenar las facturas de luz, agua, teléfono… pueden ser otros ejercicios que logren realizar con éxito la estimulación cognitiva.
Cuidados durante la estimulación cognitiva
Se debe tener en cuenta durante la realización de la estimulación cognitiva que se ha de ayudar a resolver con éxito la actividad siempre que tenga dificultades (algunos ejemplos como recordar el nombre de un ser querido o dar pistas para resolver un problema matemático). Por otro lado, no se debe dar importancia a los errores que pueda cometer y evitar que el paciente se sienta cuestionada. En resumen que recuerde la situación como un momento agradable para compartir.