Blefaroespasmo
¿Qué es un blefaroespasmo?
El blefaroespasmo es una contracción involuntaria y repetitiva del músculo orbicular, que se encuentra alrededor del ojo. Puede llegar a provocar posturas y movimientos anormales en los párpados.
Esta contracción suele aparecer de forma gradual, aumentando poco a poco en intensidad y frecuencia. Una vez que los síntomas empiezan pueden continuar de forma intermitente y durar unos días antes de desaparecer.
involuntaria y repetitiva del músculo orbicular
¿Qué síntomas presenta?
El blefaroespasmo provoca determinados síntomas característicos, que incluyen:
Fasciculaciones o espasmos repetitivos en el párpado que no pueden controlarse. Normalmente ocurren en el párpado superior, pero también pueden ocurrir en el inferior. Sensibilidad a la luz. Visión borrosa. Cierre forzado de los ojos en un intento por aliviar los síntomas.
Causas del blefaroespasmo o por qué se produce
Las causas más comunes de espasmos en el músculo del párpado son la fatiga, el estrés y la cafeína. Las contracciones más intensas, con cierre completo del párpado, pueden ser resultado de la irritación de la superficie del ojo (córnea) o en las membranas que recubren el ojo.
Además, otras causas pueden ser:
Causas neurológicas, debido a una alteración neurológica funcional en el sistema nervioso central. Efectos secundarios de algunos medicamentos. Falta de lubricación en el ojo, lo que provoca un mayor esfuerzo del párpado para distribuir de forma uniforme la escasa lágrima.
¿Se puede prevenir?
El blefaroespasmo no puede prevenirse, por lo que es necesario detectarlo a tiempo. En caso de tener sequedad ocular, se recomienda aplicar gotas lubricantes, gafas de sol o toxina botulínica, para relajar temporalmente los músculos y evitar las contracciones.
Por otra parte, es esencial que un especialista en Oftalmología realice un diagnóstico adecuado para distinguir entre blefaroespasmo y otras enfermedades oculares, como patologías corneales, glaucoma u ojo seco.
¿En qué consiste el tratamiento?
El blefaroespasmo suele desaparecer sin necesidad de tratamiento. Sin embargo, algunas medidas ayudan a mejorar los síntomas como dormir adecuadamente, reducir el consumo de cafeína y utilizar gotas lubricantes para los ojos. Si los espasmos persisten también puede resultar útil el uso de toxina botulínica. Es muy importante también proteger los ojos con gafas de sol.
En casos más graves se puede considerar la cirugía, conocida como miectomía del músculo orbicular y musculatura depresora. Consiste en extraer parcial o totalmente las fibras de uno de los músculos del párpado superior, para evitar los cierres espasmódicos.