Remodelación facial con la lipotransferencia de grasa

Escrito por:

Dr. Carlos Gullón Cabrero

Cirujano plástico

Publicado el: 08/07/2016
Editado por:


Antes de llegar la lipotrasnferencia con grasa, los cirujanos plásticos desechaban la grasa al realizar una liposucción. Actualmente, con este tratamiento el tejido adiposo se puede reutilizar. La lipotransferencia con grasa es una técnica de Cirugía Plástica, Estética y Reparadora que permite rejuvenecer un rostro con arrugas, surcos marcados o flacidez, mediante injertos de grasa. El procedimiento consiste en extraer grasa de alguna zona del cuerpo como en la tripa, muslos, cadera, rodillas o pantorrillas y reinyectarla en la cara, con el fin de otorgarle un aspecto más saludable y revitalizado.

Con el paso del tiempo, el rostro envejece, la grasa del mismo se atrofia y se caen los tejidos. Transfiriendo la grasa del propio paciente, se puede con seguir una remodelación facial para un rostro rejuvenecido y con un aspecto natural. Por tanto, al utilizar los propios tejidos del paciente no se empasta la cara ni se obtienen expresiones rígidas y antinaturales, sino que se devuelve al rostro lo que se ha perdido con el avance del tiempo.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Lipotransferencia corporal con la propia grasa

En la remodelación corporal, se utiliza la grasa extraída de unas zonas para mejorar otras. Por ejemplo se utiliza para mejorar la forma de los glúteos, dar más volumen al pecho, o aumentar el volumen de las pantorrillas excesivamente finas, entre otros muchos procedimientos.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Ventajas de la lipotransferencia con grasa propia

Podemos mejorar mucho el aspecto corporal utilizando la grasa del paciente, ya que es absolutamente compatible y el efecto es permanente.

Además, la grasa extraída y reutilizada está llena de factores de crecimiento. Éstos consiguen que, además de aumentar los volúmenes, se mejore la textura de la piel. Así se consigue una piel con más brillo revitalizada y se pueden eliminar o atenuar manchas y lesiones vasculares.

Por ejemplo, se utiliza esta técnica para disminuir o eliminar las ojeras, una patología actualmente de difícil tratamiento. El tejido adiposo a través de los factores de crecimiento ofrece también un fantástico resultado en la piel con radiodermitis, es decir, personas que han sufrido los efectos de la radioterapia, cuando hasta ahora no existía ninguna técnica que pudiera mejorar esta situación.

El aspecto fundamental en este tipo de técnicas es buscar siempre un cirujano plástico de confianza y una consulta que ofrezca seguridad. No debe olvidarse esta opción terapéutica con alto grado de pacientes satisfechos, porque la grasa cada vez será más importante.

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