Reconstrucción mamaria: seguir siendo mujer después del cáncer

Escrito por:

Dr. Pietro Mulas

Cirujano plástico

Publicado el: 08/06/2015
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La reconstrucción mamaria es una intervención de la especialidad de cirugía plástica, médica y reparadora cada vez más eficiente para conservar la feminidad de la paciente que se somete a mastectomía

El cáncer de mama es uno de los más frecuentes entre mujeres occidentales. Tanto es así que la Sociedad Española de Cirugía Plástica Reparadora y Estética (SEPRE) estima alrededor de 1 de cada 11 mujeres está en riesgo de sufrirlo. El tratamiento del cáncer puede ser la cuadrantectomia, pero también conllevar la extirpación de la mama o mastectomía para su control o curación. Por ello, cada vez más mujeres están decididas a restaurar esa parte de su cuerpo, y su feminidad, después de la extirpación, mediante la reconstrucción mamaria.

Reconstrucción mamaria ¿Cuándo puedo reconstruir mis senos?

La mayoría de las mujeres que se han sometido a una mastectomía pueden volver a reparar sus senos. Y además pueden elegir cuándo y cómo. El método más habitual de reconstrucción mamaria es la inmediata, justo después de la cirugía. La paciente se ahorra una segunda intervención, y podrá evitarse el daño emocional de verse sin uno o ambos pechos. Sin embargo, hay mujeres que prefieren someterse a la intervención reconstructora tiempo después de la mastectomia y de los tratamientos oncologicos, en diferido. Esta opción cede tiempo a la mujer para tomar la decisión e informarse de las diversas opciones reconstructoras.

Tipos de reconstrucción mamaria, elegir la técnica que mejor se adapte

En cuanto a las técnicas, los avances médicos permiten al médico poder aconsejar la mejor opción y a la paciente elegir aquella con la que se sienta más cómoda. La más habitual, mediante prótesis mamarias, es también la más rápida y sencilla. Los profesionales pueden efectuarla de una sola vez, con una prótesis definitiva. Pero también en dos tiempos quirúrgicos, dilatando progresivamente la piel mediante un expansor temporal, para luego colocar la prótesis.

Otra posibilidad más compleja, pero para muchas pacientes más natural, es la utilización de tejidos propios para reconstruir el seno. Los denominados ‘colgajos’ suelen proceder de la tripa, la espalda, y otras áreas del cuerpo de la mujer. No obstante, la intervención mediante ambas técnicas, o técnicas combinadas, también es posible. En este caso, los tejidos propios servirían para aportar cobertura cutánea y muscular, mientras que el implante serviría para reintegrar el volumen.

Gestionar una reconstrucción mamaria

La reconstrucción mamaria implica directamente a la psicología y a la calidad de vida emocional de la mujer. Es necesario que todas las pacientes sometidas a una mastectomía, o que vayan a someterse a ella, dispongan de información para poder reconstruir su cuerpo de la manera que más se adapte a sus necesidades.

Es una operación que requiere eficacia, rapidez y una buena coordinación entre diversos especialistas. Por suerte, los avances médicos garantizan excelentes resultados, y también un servicio asumible para el paciente. Por ello se ofrece una gestión privada y también mediante aseguradoras con la calidad asistencial de la medicina privada.

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