Carboxiterapia: el impacto del CO2 en el organismo
Escrito por:
Médico estético
Publicado el: 21/12/2018
Editado por: Alicia Arévalo
El tratamiento con el Dióxido de Carbono (CO2) es uno de los tratamientos pioneros en la Medicina Estética; el cual también cuenta con muchísimas aplicaciones en la medicina y casi todas sus ramas.
El Co2 es un gas incoloro e inodoro emitido por la quema del carbón, el mismo producido por la fermentación del mosto que hace que el aire de las cuevas no sea respirable.
Este gas silvestre se comenzó a emplear en Francia en los años 50 por especialistas para el tratamiento de enfermedades vasculares, enfermedades Fibroescleroticas y Reumáticas. De allí su importancia en la actualidad como tratamiento para la fibromialgia, dolores musculares y articulares y síndromes vasculares como el de Raynaud, entre otros.
En la medicina estética se empezó a utilizar como tratamiento para la celulitis y grasa localizada, pero gracias al comportamiento o al impacto de este gas en nuestro organismo, en la actualidad se utiliza para tratar:
Flacidez facial y corporal Estrías Coloración de ojeras y disminución de bolsas Acné Cicatrices post acné Queloides Reducción de papada Rejuvenecimiento de cara, cuello y escote Problemas circulatorios Retención de líquidos Varices pequeñas y medianas Caída del cabello Tratamiento pre y post liposucción Psoriasis, entre otros problemas de la piel
También se aplica en especialidades Ginecología, Urología y Medicina deportiva.
Definitivamente, la terapia con CO2 tiene numerosos beneficios, pocas contraindicaciones y efectos secundarios, además se puede aplicar con toda seguridad.